NUEVA YORK, EU., marzo 2 (AP)
El actor Dustin Hoffman cree que en Estados Unidos hay un problema racial sistemático que va más allá de los premios Oscar.
El dos veces ganador de un premio de la Academia no asistió a la ceremonia del pasado domingo en Los Ángeles, ni la siguió por televisión. Pero estaba en el mismo lugar que el premiado con el Óscar honorario de este año, que boicoteó la gala.
“Fui a ver el partido de los Knicks y vi a mi amigo Spike Lee allí, vestido para los Óscar, pero estaba en un partido de los Knicks”, dijo Hoffman anoche.
Lee asistió al encuentro disputado en el Madison Square Garden de Nueva York vestido con un esmoquin negro. El comediante Tracy Morgan, que participó en un sketch en la ceremonia, también estaba en la grada.
Por segundo año consecutivo, entre los nominados a los Óscar solo había actores blancos.
“Bueno, eso siempre ha sido así, No es nada nuevo, como Chris Rock, escuché decir: ‘¿Por qué este año?»’, respondió Hoffman.
Durante el monólogo con el que abrió la gala, Rock puso en duda la polémica diciendo: “Esta es la 88va edición de los Premios de la Academia, lo que supone que todo esto de la ausencia de nominados negros ha pasado al menos otras 71 veces”.
Hoffman fue tajante en su respuesta a por qué esta situación se repite desde hace tantos años.
Siempre ha habido racismo. Es una especie de reflejo de lo que es el país”, dijo.
Hoffman realizó las declaraciones durante la apertura del Metrograph, el primer cine de propiedad independiente que se inaugura en Manhattan en más de una década.
“Llaman a mi época la ‘Edad de Oro’ del cine, pero creo que la edad de oro del cine sigue existiendo, pero la hacen los independientes, creo que esto es para lo que sirve este teatro”, señaló Hoffman.
Y sobre cómo podría llevarse más diversidad a Hollywood, Hoffman dijo: “Cambiamos cuando la gente que está oprimida fuerza el cambio”.