Israel Reséndiz
CIUDAD MANTE, Tam.- La lluvia que se dejó sentir desde el miércoles por la tarde, así como el pronóstico del tiempo para esta zona de Tamaulipas, comenzó a generar situaciones de incomodidad para los habitantes del poblado El Limón, donde hasta este momento mucho se ha quedado a deber, pues los residentes de ese lugar saben que otra lluvia considerable volvería a causar situaciones lamentables, pérdidas materiales y un enorme botín político para el mejor postor.
La inundación del pasado 15 de septiembre del 2013 es el último recuerdo de muchas familias que despertaron literalmente entre el agua, y unas horas más tarde, enfrentando una triste realidad se dieron cuenta que todo lo perdieron, incluyendo animales de granja que se ahogaron con el nivel del agua.
Y fue el pasado miércoles cuando una vez más las familias se mostraron preocupadas por el torrente de la lluvia, pues este comenzó a generar estragos en algunas áreas, encharcamientos, inundaciones además de alcantarillas en mal estado que independientemente del agua, también sacó aguas negras, generando con ello una incomodad irremediable para quienes viven cerca de estos drenajes rebasados por el agua de lluvia.
Vecinos de ese lugar temen además de volver a vivir lo sucedido, volver a repetir el mismo episodio en el cual, autoridades de todos los órdenes de gobierno desfilaron para verificar la situación, sin embargo, nada iniciaron para evitar que de nueva cuenta, el poblado El Limón vuelva a quedar literalmente bajo el agua como hace tres años, solo figuró la entrega de despensas colchones y enseres de los cuales para muchos ya no queda nada.
El cese de las lluvias ha llegado, sin embargo, muchas personas pretenden continuar gestionando lo necesario ante las instancias para que se haga la infraestructura suficiente que evite nuevamente una inundación, sobre todo cuando se trata de un lugar que lamentaron, en repetidas ocasiones se ha visto en las mismas, y ni así se ha hecho nada para evitar el siguiente desastre económico, principalmente por las elevadas pérdidas materiales.