Alfredo Guevara
Las solicitudes de los desarrolladores de vivienda para la edificación de nuevos fraccionamientos prácticamente se vino abajo en los principales municipios de la entidad, lo que evidencia que la economía en términos generales no anda bien, confirmó Serafín Maya Sotelo.
El Subsecretario de Ordenamiento Territorial, en la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), dijo que a la fecha habrá unas seis o siete solicitudes, cada una de ellas para construir alrededor de 500 casas, cifra que pudiera decirse no son relevantes porque la cantidad se dispersa entre todos ellos.
Derivado de lo anterior, adujo que las empresas constructoras lo que pudieran estar haciendo es solicitar los permisos para la construcción de vivienda, para que una vez que mejore la economía en términos generales, se haga efectiva la autorización y se proceda a la creación de un nuevo fraccionamiento.
“Las reglas de ordenamiento de las ciudades van lento, cada vez los desarrolladores les queda claro hacer solicitudes como debe ser, pero la economía como que no anda bien, dado que la industria de la construcción es el principal termómetro y si no hay muchas solicitudes para crear nuevos fraccionamientos, es que algo pasa”, explicó.
Atribuyó la escasa demanda de solicitudes, en parte de la situación económica que impera, aunque eso permite a la autoridad, poner orden en el crecimiento de las ciudades, donde si bien queda autorizado crear un nuevo fraccionamiento, se aleja la posibilidad de que sea un asentamiento irregular.
Declaró que el problema de las ciudades son los pobres, dado que es ese tipo de personas las que no tienen acceso a terrenos en buenas condiciones, lo que da lugar a que hagan sus asentamientos en lugares sin los principales servicios, con problemas de pendientes, en zonas inundables o sobre derechos de vía.
Maya Sotelo reveló que al inicio de la administración estatal, el número de solicitudes para la construcción de nuevos fraccionamientos fue mayor, pero que, conforme avanzó el sexenio empezó a disminuir como sucede actualmente, que apenas en el año, hay entre seis y siete solicitudes para la edificación de unas tres mil viviendas en diferentes lugares.