Mauricio Zapata
El Congreso de Tamaulipas ha gastado en 30 meses más de quince millones y medio de pesos por concepto de sueldo de seis de sus integrantes que no han producido ningún trabajo al parlamento tamaulipeco.
Y es que en el récord de esos legisladores está el de sólo asistir a las sesiones a apretar el botón (antes levantar la mano) para aprobar dictámenes, que de antemano, ya les han dicho de qué manera votarlos.
Según la Gaceta Parlamentaria, desde que inició la actual legislatura, éste número de diputados han subido, a lo mucho, en dos ocasiones a la Tribuna y cuando lo han hecho es sólo para leer efemérides o la propuesta de la presidencia de la Mesa Directiva.
Los quince millones 540 mil pesos, es la suma total del salario de todos ellos, que es de 74 mil pesos mensuales a lo largo de éstos 30 meses de gestión.
Se trata de los legisladores:
Laura Felicitas García Dávila, PRI
Patricia Guillermina Rivera Velázquez, PAN
José Salvador Rosas Quintanilla, PAN
Marco Antonio Silva Hermosillo, PRI
Homero Reséndiz Ramos, PRI
Juan Diego Guajardo Anzaldúa, PRI (hoy con licencia)
Además, algunos de ellos han acumulado varias inasistencias, lo que hacen menos productivo su trabajo legislativo, incluso en las reuniones de trabajo de las Comisiones a las que pertenecen.
Uno de los menos productivos fue el tricolor Juan Diego Guajardo, quien hasta su petición de licencia (cuatro de febrero) sólo subió en 29 meses dos veces a Tribuna, las dos, una para leer una efeméride y otra más para proponer una Mesa Directiva.
Si bien, en su currícula que se difunde en el sitio de Internet del Congreso se mencionan varias iniciativas, son las que han presentado en conjunto con sus respectivos partidos.
Hay otros diputados con pocas participaciones en Tribuna, pero sí con asistencias y acciones en las Comisiones que integran, lo que de alguna manera desquitan su salario.
