José del Carmen Perales Rodríguez
“Definitivamente haber pertenecido a un cuerpo policiaco nos cierra las puertas de la mayor parte de las empresas privadas, ni los de seguridad privada nos quieren, haber sido policía me hace sentir como apestado. Aquí (en la Feria del Empleo) no quieren ex policías”, así resume Valentín su experiencia en este evento en el que no tuvo suerte entre las alrededor de 500 vacantes que ahí se ofertaban.
El ex agente de la Policía Estatal Acreditable, quien pidió no fotografiarle el rostro, es sólo uno de los cientos que acudieron a la Cuarta Feria Estatal del Empleo con la esperanza de conseguir una fuente de ingresos, aunque otros con la intención de mejorar sus condiciones económicas y las de su familia.
“Salí de la Policía Estatal sin mancha en el expediente es decir no salí por pérdida de confianza ni por haber hecho algo malo, pero no me dieron ninguna recomendación ni me liquidaron, sólo me echaron. Vine con la esperanza de obtener un empleo, pero aquí no quieren ex policías, apestamos”, recalca.
Antes de despedirse, portando en sus manos la solicitud de empleo que llevaba preparada, Valentín comenta que afortunadamente tiene avanzada una entrevista en una maquiladora que le podría dar la oportunidad de mejorar la economía familiar.
“Ahorita vendo elotes pero no me alcanza, tengo tres hijos que estudian preescolar y primaria, espero conseguir empleo o cuando menos que me den otra oportunidad en la policía porque no salí mal.
“Incluso he dialogado con los nuevos mandos pero hasta ahora nada, me dicen que mejor me espere hasta el otro sexenio. Así lo haré y ojalá resista, porque hasta ahora no me he pasado a la delincuencia porque aún tengo esperanza pero sobre todo por mi familia”, dice al despedirse.
Y lo dicho por el ex policía se pudo corroborar por este reportero al visitar tres de las mesas receptoras de solicitudes, entre ellas la de Fuerza Tamaulipas, que ofertaban vacantes para vigilancia o seguridad.
Los encargados aunque de forma abierta no reconocieron que uno de los requisitos de los aspirantes era no haber sido policías, sí argumentaron que esos casos “especiales” son tratados de forma directa por las oficinas centrales.
“Allá se les da seguimiento y se revisan e investigan sus antecedentes, pero aquí no se les rechaza sólo se les dice que dejen sus documentos y se les da un número telefónico para que soliciten información sobre el avance de la solicitud”, se limitaron a comentar en los tres casos, aunque para evitar cualquier señalamiento subrayaron: “¡Pero no se les discrimina eh!”.
EVELYN, POR SU PRIMER EMPLEO
A su llegada al recinto la joven pasante de la licenciatura de psicología comenzó a buscar la representación de una empresa que solicitara una profesional con su perfil, pero de entrada reconoció que estaba difícil porque seguramente le pedirían alguna referencia y sobre todo experiencia.
“Estoy buscando mi primer empleo, recién obtuve la carta de pasante como Licenciada en Psicología y espero tener suerte, aunque estoy consciente que no será fácil porque yo quiero trabajar en algo relacionado con lo que estudié, pero hasta ahora no he encontrado nada”, comenta con tristeza.
Tal vez lo que le da tranquilidad es su soltería, aunque sí le apura poder apoyar a su familia para los gastos de la casa y devolverles algo de lo que gastaron en su carrera, “no tengo experiencia y eso juega en mi contra, pero espero que haya alguna vacante relacionada con mi perfil profesional”, dice mientras pide le deseemos suerte.
JUAN Y CAROLINA, AMIGOS Y DESEMPLEADOS
Juan Carlos es licenciado en sistemas, mientras que Carolina admite no tener “tantos estudios” como su amigo, pero a la vez reconoce que para ella fue más fácil recibir una oportunidad de empleo porque al menos ya le dieron una cita para presentar examen en una tienda departamental.
“Yo quiero trabajar en lo que estudié y que me costó mucho trabajo–comenta Juan Carlos–, pero en estas ferias de empleo no hay vacantes de puestos relacionados con mi profesión sólo de operarios y obreros generales, no sé si los puestos importantes están todos ocupados o no los traen aquí a la Feria del Empleo”, dice con suspicacia.
Al mismo tiempo aclara: “Sin que esto suene a que estoy menospreciando a quienes como yo no tienen empleo, creo que ya deberían pensar en hacer ferias de empleo para quienes tenemos algún perfil profesional. Sí tengo necesidad de un empleo pero no de lo que sea, si así fuera desde la secundaria me hubiera ido a trabajar y no tener qué estudiar seis años más”.
Carolina por su parte dice estar optimista de que le llamen para alguna vacante pues pese a que sus necesidades son muchas, “no tengo tantos estudios como él y podría decirse que me conformo, pero hay más espacios para quienes tenemos este perfil. Por lo pronto iré a presentar un examen a una tienda departamental y espero ser aceptada, realmente necesito el empleo”, concluye.
