Rogelio Rodríguez Mendoza
A seis meses de que concluya el ejercicio de la LXII Legislatura, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ramiro Ramos Salinas, descartó que se tenga proyectado la entrega de algún bono o estímulo a los diputados.
“El Congreso de Tamaulipas es de los más austeros con apenas un presupuesto anual de 129 millones de pesos, cuando hay otros que gastan entre 800 y hasta mil millones de pesos. Por eso quiero agradecerles a los diputados que aunque somos los que aprobamos el presupuesto cada año no nos hayamos aumentado la partida para el Poder Legislativo”, mencionó.
Por esa razón, insistió, no hay planes para entregar bonos o estímulos a los legisladores.
Pese a lo limitado del presupuesto, Tamaulipas figura a nivel nacional por tener un Congreso que es punta en el avance legislativo.
“Tenemos un edificio de primera y un personal altamente calificado, lo cual ha permitido que vayamos manejando las cosas en orden y sacando adelante el trabajo”, indicó.
Entre los temas que son los grandes pendientes para la actual Legislatura figuran: el de transparencia, el nuevo sistema de justicia penal acusatorio y la aplicación de la llamada justicia cotidiana.
“Son temas que esperamos ir desahogando en los tres meses que nos resta para sesionar y los otros tres en los que estará en ejercicio la Diputación Permanente”, mencionó.
El también Coordinador de la bancada del PRI admitió la posibilidad de que no sea esta Legislatura la que defina el llamado matrimonio igualitario, entre personas del mismo sexo.
Dijo que no hay consenso entre las diferentes bancadas parlamentarias, por lo que es un tema que podría heredársele a la siguiente Legislatura.
