Adela Hernández TAMPICO, Tam.-
La falta de oportunidad laboral está obligando a muchos jóvenes a la actividad ilícita de la pesca furtiva en áreas prohibidas.
A decir de las autoridades de ecología en Tampico, las especies del Canal de la Cortadura y Laguna del Carpintero no son consumibles por el ser humano, por el alto contenido de plomo y otros elementos en sus aguas.
Sin embargo, la falta de empleo orilla a muchos a sacar pescados y jaibas de estos lugares para comercializarlas y para consumo familiar.
Al entrevistar a un pescador que se encontraba sobre este canal en un lugar recóndito ubicado en la ex-zona industrial de la Isleta Pérez.
El joven comentó que desde el pasado mes de enero se encontraba sin trabajo, había sido despedido por corte de personal de una empresa perforadora de pozos que trabajaba para Petróleos Mexicanos.
Dijo que el producto que sacan de estas aguas tales como róbalos, tilapia y jaibas, logra subsanar los gastos familiares y de escuelas de sus hijos.
Detalló que seguido tiene que huir de la policía, pues al ser detenido no solo paga una exagerada multa, también le decomisan sus artes de pesca valuados en mil 500 pesos.
Reconoció que dicha actividad está prohibida, argumentando… “De algo tengo que sobrevivir junto a mi familia y de hambre no me he de morir”.