Su olor a citronela y su tono rosado han acompañado por 46 años a las familias mexicanas.
Seguramente conoces el jabón Zote, pero ¿sabes cómo se convirtió en uno de los preferidos del país?
En 1970 la Fábrica de jabón La Corona lanzó al mercado un gran jabón, competitivo en cuanto a calidad, desmanchado y perfume: un jabón-Zote.
A través de este juego de palabras -parte de la picardía mexicana- fue que la compañía fundada por Esteban González Padilla -originario de Tepatitlán, Jalisco- lanzó Zote al mercado, el cual no tardó convertirse en producto líder.
«El jabón Zote quizá fue el primer jabón a nivel mundial o uno de los primeros que se hizo a partir de ácidos grasos destilados de grasa, fue una novedad», señaló Daniel Jiménez, gerente de la División Jabonería de La Corona, la cual desde su origen pertenece a la misma familia.
En su momento, señaló, Zote utilizó uno de los procesos más modernos, el cual le dio propiedades como el color, el perfume y eficiencia en el desmanchado.
El registro del nombre lo tenía una fábrica de Querétaro, pero lo cedieron.
Con cero pesos en inversión para publicidad, actualmente este jabón abarca entre un 60 y 70 por ciento del mercado en México, estimó Jiménez.
Esta fábrica, que tiene una de las tres plantas más grandes de jabón a nivel mundial, decidió lanzarlo para competir con otros productos que estaban reduciendo las ventas de uno de sus jabones tradicionales, el Tepeyac.
Aunque fue creado como un jabón de lavandería, el ingeniero confiesa que constantemente en la Fábrica de Jabón La Corona reciben llamadas de amas de casa preguntando por aplicaciones alternas.
Desde aromatizar cajones con pedacitos de jabón Zote, usarlo para bañarse, para modelado en talleres de arte, y hasta como sellador de fugas de gas y tanques de gasolina, son algunas de las variables que le ha encontrado la creatividad mexicana.
Jiménez reconoce que oficialmente no pueden desmentir esos usos, pero tampoco pregonarlos.
«Lo que nosotros comprobamos es su desempeño como producto de limpieza», señaló, «no es un jabón cosmético ni es un jabón medicinal, por lo tanto oficialmente no podemos pregonar eso».
La que más ha impresionado al gerente es saber que Zote es el jabón oficial en los quirófanos .
Aunque su presentación es la misma, la tecnología ha aportado algunos cambios a su manufactura.
Anteriormente una barra tardaba cuatro días en estar lista, hoy sólo bastan cinco horas para que el aceite vegetal y sebo de res se transformen en un jabón etiquetado y listo para distribuirse en todo el país.
En su planta, ubicada en el Parque Industrial Xalostoc, las barras rosadas y blancas recorren la línea de producción, una tras otra, hasta la caja que las llevará a su destino.
Su presentación más nueva es el Jabón Zote blanco de finas escamas, lanzado en 2011.
Aproximadamente el 85 por ciento de la producción de Zote se queda en México, el resto tiene como destino principalmente Estados Unidos y después Sudamérica.
Como parte de su éxito, Zote no se ha salvado de los imitadores. Jiménez señala que han detectado copias provenientes de China y productos con un nombre similar.
Aunque el uso de jabón disminuye en los hogares, la producción de Zote se mantiene estable desde hace 20 o 25 años gracias al crecimiento de la población.