El cantante Luis Miguel hace apenas un día cumplió 46 años y ya quiere que lleguen los 47 ante un cumpleaños no feliz, que de «regalo» le ha traído problemas de salud, abucheos de sus fans, demandas y una exitosa carrera que se podría ir a pique.
El intérprete conocido como «El Sol» ha sido eclipsado por causas ajenas a su talento y trayectoria, según publicó ayer la edición digital del diario argentino «Clarín», ya que un ex tecladista de su banda que lo demandó hace más de 10 años -bajo el argumento de que lo obligó a trabajar estando enfermo- ganó la querella legal y ahora la Corte resolvió que debe pagarle una cifra millonaria como indenmización.
Pero lo que realmente preocupa al famoso festejado, de nombre real Luis Miguel Gallego Basteri, es su frágil salud que afectan directamente su carrera, pues desde noviembre del año pasado, por una tinnitus degenerativa (que consiste en percibir golpes o sonidos en el oído que no son generados en el exterior), el cantante debió suspender varios shows en México y finalmente su gira durante el pasado marzo y el presente abril; en tanto sus detractores vaticinan que incluso podría quedarse sordo.
Además, para variar, al momento más oscuro en los más de 30 años de carrera de «El Sol» se suman la desilusión, abucheos y posible pérdida de fans hartos de asistir a shows que podrían cancelarse en cualquier instante.
Finalmente el tiempo y la falta de ejercicio le ha cobrado factura al otro sex symbol de la música pop, pues el evidente sobrepeso del «crooner» (intérprete masculino de baladas románticas) ha sido inspiración para «memes» que van de los simpáticos a los más crueles en las redes sociales.