Shalma Castillo
En los últimos cinco años, en Tamaulipas existen más de 136 mil casos nuevos de asma, padecimiento que ocasiona un problema del sistema respiratorio, el cual puede llegar a ser curable con el tratamiento adecuado, pero también puede resultar riesgoso, hasta ocasionar la muerte.
El asma y estado asmático son dos padecimientos similares, pero se registran en la misma clave.
El epidemiólogo estatal de la Secretaría de Salud, Daniel Carmona Aguilar, informó que en el año 2010 diagnosticaron 29 mil 120 casos nuevos, en el 2011 fueron 20 mil 772, en el 2012 incrementaron hasta 24 mil 851, mientras que en el 2013 registraron 21 mil 851, en el 2014 20 mil 989 y el año pasado descendió la cifra a 19 mil 113.
En los cuatro meses que van de este año, se han detectado cinco mil 594 personas con padecimiento asmático, precisó.
La última estadística de mortalidad por esta enfermedad fue en el 2014, cuando se registraron 17 defunciones en diferentes zonas del estado.
Ante ello, el funcionario estatal explicó que el asma es una enfermedad del sistema respiratorio, caracterizado por inflamaciones la vía aérea.
El cuadro clínico del asma consiste en dificultad para respirar, tos, presión y “chillido” de pecho.
El tratamiento que reciben estas personas son broncodilatadores para dilatar las vías aéreas, los mucolíticos son para que el moco o flemas se hagan más diluidas y el paciente pueda expulsarlos, también pueden recibir esteroides para desinflamar las vías aéreas.
Dijo que las personas que padecen este problema, puede ser producto de una alergia, ya sea al polvo o polen, también por herencia.
La crisis asmática es la más grave, se caracteriza cuando el broncoespasmo no responde al tratamiento adecuado y en ocasiones provoca que el nivel de oxígeno en la sangre baje y también la pérdida de la conciencia.
Quienes padecen de esta enfermedad, suelen ser más susceptibles al humo del cigarro cuando lo respiran.