Clemente Zapata M.
En la comisión del delito de homicidio, la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas (PGJE) registró un incremento del cien por ciento durante el segundo bimestre del año 2016 en comparación con los meses de enero y febrero, y son los municipios de Victoria y Reynosa los de mayor incidencia.
Ismael Quintanilla Acosta, procurador general en la entidad, reveló en entrevista que durante el primer bimestre del presente año se presentaron un total de 80 muertes, principalmente infractores de la ley, esa cifra se duplicó para los meses de marzo y abril, que llegaron a 160.
Esta situación ha provocado que la PGJE se vea obligada a tener los cuerpos de las personas abatidas en confrontaciones en el Servicio Médico Forense (Semefo) hasta por dos meses, para registrar sus datos genéticos y en caso de ser requeridos sus cuerpos por familiares se puedan identificar plenamente.
Debido a que esas personas cometen actos reñidos con la ley, regularmente no portan identificaciones y cuando son abatidos se desconocen sus generales, y parte del trabajo de la institución es poder reconocerlos y en su caso entregar los restos a quien los solicite.
“Son personas que están delinquiendo, no traen identificaciones, se mantienen en el Semefo por determinado tiempo, después a la vuelta de semanas llegan familiares; nosotros conservamos esos cuerpos, tenemos fotografías o los tenemos físicamente”, explicó.
Quintanilla Acosta señaló que la elevada incidencia de homicidios está relacionada con la situación que padecen grupos infractores de las leyes que sostienen enfrentamientos internos y entre rivales, y que buscan el control de algunas ciudades como la Capital.
Aseguró que dentro de la coordinación que existe entre las instituciones se busca reducir la incidencia de delitos de alto impacto, como es el secuestro y precisamente la privación de la vida, sin embargo son conflictos entre civiles los que detonan este segundo ilícito.
En el caso de Reynosa también se padecen situaciones de inseguridad, por lo que también se presenta una atención permanente de Fuerzas Federales como las Secretarías de Marina y de Defensa Nacional, así como Policía Federal para garantizar la seguridad.
