Alejandro Echartea
El pasado miércoles arribaron a la Administración Portuaria Integral de Altamira cuatro coques provenientes de España, cada una con más de 600 toneladas de peso y los cuales serán utilizados para equipar la refinería “Miguel Hidalgo”, en el municipio de Tula de Allende, Hidalgo, en un recorrido de casi mil kilómetros cruzando por las carreteras del estado de Tamaulipas.
Esta es la segunda vez que se mueve equipo industrial de estas dimensiones en el mundo y la primera que se realiza en México, asimismo se está rompiendo un récord de kilómetros utilizados para transportar esta pesada carga ya que, mientras que en Canadá se recorrieron 482.80 kilómetros, en nuestro país habrán de recorrerse 885.13.
Estos trabajos se están realizando con el consorcio conformado por las empresas Pesado Transport y Eseasa Construcciones, empresas de origen tamaulipeco y asentadas en el municipio de Altamira, “es el grupo que está moviendo actualmente los tanques de Coque, son dos etapas de traslado, ahorita estamos moviendo cuatro tanques del puerto de Altamira hasta la ciudad de Tula, Hidalgo”, indicó el ingeniero Héctor Flores.
“Las maniobras consisten básicamente en el traslado, tenemos que prever tráfico, tenemos que prever clima, tenemos que prever maniobras dentro del camino, tenemos que prever todo lo que conlleva el transporte pesado, básicamente es hacer las cosas con cuidado”.
Para realizar este traslado de equipo se requirió de casi un año de estudios previos de ingeniería para los casi mil kilómetros de recorrido, “en cada punto ya se hicieron análisis, puntos de ingeniería en donde se vio la forma en que vamos a pasar y cómo vamos a ir pasando”.
El tiempo de recorrido será de casi dos meses, según lo que se tiene calculado y el promedio de la velocidad será de tres kilómetros por hora, “el recorrido que llevamos de Altamira hasta aquí hasta González ha sido muy satisfactorio, hemos transitado de manera constante”.
En esta maniobra participan sesenta trabajadores de las empresas Pesado Transport y Eseasa Construcciones, así como diverso personal de dependencias federales como la CFE, la Policía Federal, SCT, y Capufe.
No obstante, también colabora Gobierno del Estado de Tamaulipas en este primer tramo, municipios, comunidades ejidales y propietarios particulares. El ingeniero Héctor Flores apuntó que el API de Altamira fue seleccionado por contar Tamaulipas con la infraestructura portuaria y carretera necesaria para realizar el traslado; “las condiciones geográficas de Veracruz es un poquito más encerrado, no tienen las características para poder sacarlos tan fácilmente y este recorrido que tenemos de mandarlo hacia Victoria y luego regresar no es al azar, se analizaron tres rutas completas y esta fue la que para nosotros representa el mejor traslado”.
El ingeniero civil señaló que en un futuro con la llegada de capital extranjero serán cada vez más comunes estos tipos de traslados por las carreteras tamaulipecas; “los extranjeros lo primero que quieren es que las cosas se hagan bien y rápido y lo primero que van a hacer es modular las cosas y esto es modular las cosas, cuando llegan armadas para instalarse en el menor tiempo posible de construcción y esto es parte de lo que viene”.
Serán removidos puentes y evadidas montañas en el camino de los coques.
Por otro lado, la responsabilidad del acondicionamiento y definición de la ruta corre a cargo del ingeniero Jorge Espinoza; “soy la persona que está llevando a cabo todos los trabajos previos para que los equipos puedan transitar normalmente, actualmente tenemos ya casi un año trabajando en este proyecto, a mí me tocó definir la ruta completa desde el API de Altamira hasta Tula, Hidalgo”.
RUTA A SEGUIR
La ruta cruzará por comunidades como Ciudad Victoria, Tula, Tamaulipas, El Huizache, San Luis Potosí, Querétaro, Tequisquiapan, San Juan del Río, Jilotepec, Jorobas y Tula, Hidalgo; “son aproximadamente 959 kilómetros de recorrido, se ha hecho demasiado trabajo para poder hacer transitar la pieza”.
En cuestiones técnicas, el ingeniero civil indicó que se cuenta con más de 950 puntos críticos en el camino del pesado equipo, para lo cual se ha levantado y se ha diseñado muchísima ingeniería para hacer los trabajos previos.
“Se dividieron los trabajos que eran más complicados para nosotros, los que iban a llevar más tiempo”, como ejemplo señaló el túnel en el kilómetro 24 de la carretera Rumbo Nuevo, en la cual fueron removidos 39 mil metros cúbicos de material para hacer un paso para librar ese obstáculo con un trabajo de casi tres meses; en el estado de Querétaro tuvieron que construirse cuatro kilómetros de terracería para librar las vías de ferrocarril y se movieron 19 mil metros cúbicos para poder maniobrar sobre el piso, en Tequisquiapan se hicieron brechas para pasar con las piezas, en Estación Manuel se levantó un puente ganadero de 180 toneladas, en Núñez, municipio de Guadalcázar, San Luis Potosí, se moverá un puente con cinco claros, serán seis puentes que serán removidos en su camino así como 69 puentes peatonales.
Para trasladar el equipo se compró maquinaria especial hecha en Alemania pero con especificaciones diseñadas en los Estados Unidos; “los camiones fueron diseñados especialmente para este movimiento en Estados Unidos, son unos equipos especiales que nos ayudan también para absorber las irregularidades del terreno a base de un sistema tanto hidráulico como neumático”.
En los cuatro convoyes se utilizan mil 536 llantas, cada línea de módulo contiene 16 llantas, enfrente hay diez líneas y en la parte de atrás doce más, “que es donde se concentra la mayor parte del peso”.
“Se trabajó para poder cumplir con las necesidades que la SCT nos pedía, nos pedía que la capacidad de una llanta la presión que ejercemos en el piso no pase los 2.5 toneladas, y ahorita nosotros traemos 2.05 toneladas”, esto, aclaró, para no lastimar el asfalto, “si tenemos mucha carga y no la tenemos bien distribuida cualquier puente por sobre pasemos puede colapsar”.
Cada uno de los módulos está separado con 6.36 metros; “nuestra primera propuesta era tener un módulo rígido ya que un módulo rígido nos permite pasar cualquier curva, hasta ocho grados de inclinación en una curva lo podíamos pasar y con un módulo separado no”. No obstante los puentes no podían soportar 800 toneladas de peso sobre ellos.
Cada módulo cuenta con silletas y tornamesa que permiten movimientos verticales que estabilizan la pieza; “se requiere mucha comunicación en un convoy, tanto el líder del convoy como el cabo de moduleros debe estar en completa sincronía ya que la velocidad del camión debe de ser una velocidad que el operador del módulo pueda responder, si va muy rápido a lo mejor no le alcanza a subir la línea y puede ocasionar un accidente”.
Jorge Espinoza destacó la capacidad de logística requerida para estos trabajos por lo que reconoció al Gobierno del Estado de Tamaulipas por su colaboración, “y decirle a la gente que maneje con cuidado ya que vamos a estar transitando, ya conocen la ruta donde vamos a estar pasando estos meses y que tengan sus precauciones, a veces se entiende que están desesperados pero hay que tener precaución”.
La operación será realizada con personal con años de experiencia.
DESCANSOS
El traslado de los más de dos mil 400 toneladas por las carreteras de Tamaulipas habrá de ser realizado gracias al esfuerzo de trabajadores con años de experiencia, como es el caso del supervisor de módulos, Josué Barrera, “yo estoy coordinando que nivelen, que den dirección bien, todos los detalles que puedan ocasionar algún percance, entonces tenemos que ir anivelando hasta que queden a cero grados la plataforma modular, como las piezas son demasiado altas pueden sufrir una volcadura, el centro de carga es demasiado alto”.
Josué tiene 19 años trabajando en periféricos, segundos pisos, y proyectos para refinería en Cadereyta, Salina Cruz, y Minatitlán; “es la primera vez que en todo México el recorrido es muy largo, lo voluminoso de las piezas y el peso es la primera vez que se hace aquí en México”.
De los 19 años de experiencia Josué Barrera lleva 12 años trabajando en la empresa tamaulipeca; “prácticamente todo el tiempo estás fuera de casa, es el único problema, que dejas mucho tiempo a la familia, pero, ¿qué le hacemos? Tenemos que trabajar”. En cuanto al riesgo señala que este con el tiempo se ve normal, “pero la confianza es la causante de accidentes, entonces tener que trabajar con la mayor seriedad y profesionalismo posible”.
Víctor Morales León, líder de convoy, cuenta con 30 años manejando tráiler en la industria; “yo empecé a la edad de quince años como ayudante y de ahí uno va subiendo, lo van subiendo a carros pilotos, maniobristas, hasta que llega uno al tráiler para empezarlo a manejar”. Comenta que mucho de lo que sabe lo sabe gracias a compañeros que ya no están, “es lo que nos va dando la experiencia con los años, día con día aprendiendo de más gente que ya no está aquí y que fueron los que nos enseñó”.
Oscar Jesús Andrade Martínez también es operador de tracto camión, y uno de los operadores de un módulo de carga de los coques, “es a través de los años con la experiencia que has adquirido y a base de los compañeros que te van apoyando en toda esta trayectoria para llegar a hacer lo que es un chofer”.
Así como sus compañeros Andrade Martínez ha colaborado en varios proyectos, “la empresa es la que selecciona a los choferes que vamos a ir adelante, la empresa a través de los años nos conoce y nos brinda la confianza”.
Por otro lado, Jorge Iván Vilchis, también operador de módulo, menciona que lo más difícil para todos los trabajadores es la larga ausencia que tienen de sus casas, “este trabajo es muy riesgoso como todo, pero este trabajo sí tienes que ponerle mucho empeño y no descuidarte en ningún momento porque como decíamos hace rato en la plática de seguridad”.
Iván Vilchis está casado y es padre de cuatro niños que lo esperan en casa; “es difícil eso, salirte de tu casa dos meses, tres meses y simplemente comunicarte con ellos vía telefónica”.
Por otro lado comentó que a partir de este sábado las medidas de seguridad se tendrán que extremar, ya que saldrán a una carretera muy transitada. “Tenemos que cuidarnos nosotros y cuidar a la gente, cuidar a los peatones y los carros porque mañana vamos a empezar a circular con carros”.
El operador de módulos ha participado en cuatro movimientos importantes en la ciudad de Coatzacoalcos, en Salina Cruz, en Cadereyta, y en Ciudad Madero.
