diciembre 14, 2024
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Exhorta Nobel de la Paz impulsar a cine y libros

mayo 8, 2016 | 123 vistas

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 7 (Notimex)

El planeta necesita mentes y mensajes positivos que ayuden a construir la cultura de la paz, apoyados en la literatura infantil y el cine, señaló Rigoberta Menchú Tum, Premio Nobel de la Paz 1992.

En la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) consideró que la humanidad enfrenta una avalancha de aislamiento social, pues a pesar de tener acceso a más tecnología, niños y adultos están cada vez más solos, rodeados de mensajes que promueven la competencia, la rivalidad y el egoísmo.

“Mientras más tecnología existe, la humanidad está más aislada, enfrenta delitos de lesa humanidad, la brutalidad que se comete en la calle todos los días, la violencia intrafamiliar”, expresó en un comunicado.

Al dictar una conferencia magistral en la Coordinación de Humanidades, observó que la violencia, los mensajes de rivalidad y el egoísmo excesivo les llegan a los niños mediante cintas y videos que ven en sus computadoras y teléfonos celulares.

En este sentido, destacó la necesidad de propuestas que rescaten la cosmogonía de los pueblos indígenas, a quienes, dijo, la industria cinematográfica ha creado como “ignorantes, sucios, pobres e incivilizados, mientras su cosmovisión la reduce a brujería”.

Ante un auditorio compuesto por estudiantes, académicos y niños, aseguró que se mantendrá cercana a proyectos educativos que incluyan valores como la multiculturalidad, pues forma parte importante del desarrollo de los pueblos.

La también defensora de los pueblos indígenas compartió que tras la muerte de su hijo Tz’unun, hace 18 años, decidió dedicarse a la literatura infantil, basada en los principios de la cultura maya.

Primero escribió “La niña de Chimel”, que narra su propia niñez y rescata códigos y valores que le enseñaron sus abuelos, además de recrear los templos y las montañas de la región en que creció, en Guatemala.

“El vaso de miel” es otro de sus cuentos, en el que relata cómo es Chimel y las costumbres de la comunidad, pero también retoma aspectos del “Popol Vuh” y la arquitectura de los mayas.

 

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