CIUDAD DE MÉXICO, mayo 13 (Agencias)
Pemex está dispuesta a quedarse con una participación minoritaria en sus refinerías si logra concretar alianzas con socios que no sólo inviertan recursos sino que operen las plantas, dijo Juan Pablo Newman, director de Finanzas de la compañía.
La empresa ha dicho que quiere vender activos no estratégicos como parte de un amplio plan de ajustes y recortes de gastos e inversiones para enfrentar la dramática caída de los precios internacionales del crudo, que llevó al Gobierno a inyectarle ingentes recursos para enfrentar deudas y compromisos.
“Podríamos no tener mayoría en la parte de estas refinerías (…) Lo que vamos a hacer es diluir nuestra participación”, dijo Juan Pablo Newman, director de Finanzas de la compañía, en una entrevista con Reuters.
Pemex tiene seis refinerías en México con capacidad para procesar 1.58 millones de barriles por día. Tres han sido modernizadas, pero otras tres todavía necesitan hacerlo, lo que requeriría de fuertes inversiones.
“Es un área en la que creemos se puede mejorar mucha la eficiencia. En ese sentido creemos que traer un socio que nos ayude a operar va a ayudar a la seis refinerías”, dijo.
Por otra parte, Newman afirmó que la producción de crudo de la empresa podría promediar este año un poco más de 2.13 millones de barriles por día (bpd), cifra que fue fijada como meta en febrero cuando se anunció un ajuste de gastos por cien mil millones de pesos que mermarán la producción en unos cien mil bpd en 2016.
La producción petrolera de Pemex ha venido cayendo sostenidamente desde que llegó a un pico de 3.4 millones de bpd en 2004.
Y aunque cuando se anunció el ajuste del gasto los cálculos se hicieron a 25 dólares por barril -la mitad del estimado para la mezcla mexicana en el presupuesto para este año-, Pemex no descarta que si los precios mejoran puede generarse una suerte de fondo que sirva para sanear las cuentas.
“Nosotros lo que queremos es mantener para este año el precio a 25 (dólares por barril) pese a que pueda materializarse algo superior. ¿Qué vamos a hacer con ese excedente? (…) Vamos a tratar de reducir nuestro déficit financiero (…) y seremos muy conservadores en las estimaciones de ingresos no sólo de este sino de los siguientes”, dijo.
Sobre los planes de la empresa para lanzar este año una Fibra E dentro de sus opciones de financiamiento, Newman dijo que era poco probable porque diseñar el instrumento necesita mucho trabajo interno.
“Yo lo veo muy complicado, se está trabajando en eso (…) pero los tiempos parecen difíciles. Por ahora no está dentro del programa de financiamiento, si lo logramos (este año) sería una muy buena noticia”, dijo.
La Fibra E es un fideicomiso de inversión conformado con activos de energía e infraestructura de los que se emiten unos certificados. Ninguno ha debutado aún en el país.
Newman dijo que se han puesto en revisión los diversos planes de financiamiento y que la empresa esperaría el mejor momento para lanzarlos.
Y sobre los activos, inclusive los no medulares, afirmó que todos están siendo analizados y no necesariamente para ser vendidos.
“Si la preocupación (…) es ¿qué vamos a vender? Ese ni es el camino, ni es el futuro, ni estamos preocupados por hacer eso. El punto es hacer de la empresa una empresa eficiente y productiva y eso no lo dan las monetizaciones, nos lo da las eficiencias”, dijo.