diciembre 15, 2024
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mayo 14, 2016 | 142 vistas

Paoletti Rodríguez

 

Desde hace seis años, Juan Horta Juárez toca su violín en el centro de la Ciudad con la intención de obtener a cambio de esta actividad algunas monedas para sus gastos del día.

A sus 79 años de edad continúa trabajando para ganarse la vida, desde temprana hora sale de su casa ubicada en la colonia Azteca, un pequeño cuartito que le rentan por la cantidad de 300 pesos, aunque difícil de reunir cada mes.

A las diez de la mañana llega al centro, hace tres días todavía se ponía a tocar en el once y 12 Hidalgo, frente a un negocio, sin embargo el gerente del lugar le pidió que se retirara argumentando que obstruía la vista de las personas hacia la mercancía.

Ahora ha encontrado una banca en la esquina del diez Hidalgo, aunque en este lugar dice que le va muy mal, pues es poco lo que reúne, la gente que pasa no lo ve por los puestos instalados sobre la banqueta y es un espacio muy chico donde debe acomodarse.

“Hace tres días me quitaron de allá, dijo el gerente que le tapaba la mercancía, tengo seis años poniéndome en ese lugar pero a los demás comerciantes no les dijeron nada, a los que venden cosas de plástico sí los dejaron ahí”, comentó.

Juanito tiene un gran gusto por tocar el violín y ahora es una actividad que le sirve para vivir, la gente lo escucha tocar y le da algunas monedas utiliza para sus gastos.

 

UN GUSTO QUE INICIÓ DESDE SU INFANCIA

Nos cuenta que a la edad de ocho años aprendió a tocar el violín, su padre era músico y le gustaba escucharlo, también sabía tocar la guitarra y la jarana, por tal razón heredó el gusto y el talento por la música y ahora se dedica a esto.

La gente que pasa por el lugar es generosa y le da algo de dinero, a veces le piden que toque canciones como “Tampico hermoso”, “el querreque”, “el caballito”, entre otras, por esta razón permanece durante horas en el centro deleitando con su música.

“Me gusta estar aquí tocando el violín aunque es difícil, pero me gusta estar complaciendo a las personas que me piden una melodía a cambio de una moneda, es lo único que tengo para salir adelante, porque no tengo otra forma de hacerlo”, refirió.

Su pasión por la música, en especial por este instrumento, le da ánimos para salir adelante, pero sobre todo la necesidad conseguir el sustento de su casa, aunque solamente viva solo, es difícil hacer frente a los gastos.

“Me gusta lo que hago, por eso estoy aquí, aunque sí batallo mucho sobre todo por mi edad, pero ahí estamos echándole ganas, todos los días vengo para el centro a tratar de ganar un poco de recurso para mi casa”, comentó.

Anteriormente se dedicaba a otra actividad, al trabajo del rancho, sin embargo conforme fue avanzando su edad ya no lo contrataron y se vio en la  necesidad de buscar otra forma para ganar dinero y llevarlo a casa.

“Me dedique al trabajo del rancho, mi papá era músico, tocaba el violín, la guitarra quinta, la jarana y yo viendo como lo hacía pues aprendí, ahorita se me vinieron los años encima, entonces ya no conseguí trabajo, y por eso me dedique a esto.”

Conforme pasaron los años logró perfeccionar su música pues no se sabía muchas canciones y posteriormente se dedicó de lleno a esta actividad.

Actualmente cuenta ya con un amplio repertorio de canciones porque constantemente la gente le solicita alguna a cambio de una generosa cantidad.

“Anteriormente trabajé en diferentes actividades, sin embargo por mi edad comencé a batallar con algunas de estas, por lo que me vi en la necesidad de retomar la música como un modo de vida, para salir adelante”.

Las canciones que ha aprendido en todo este tiempo es de ver a personas tocar, “trabajaba en el campo, en el trabajo del rancho, de ahí me vine a Nuevo Laredo, trabajé en una empresa y aquí tengo seis años, y aquí me quedé, no es fácil, pero pues la música nunca le entendemos totalmente, y a la gente le gusta mi música”, señaló.

Cuando tuvo que buscar una forma de ganarse la vida, tocar el violín fue lo primeo que se le ocurrió, porque sabía hacerlo y además le gusta, con mucho esfuerzo logró obtener este instrumento que le ha dejado muchas satisfacciones.

 

CONFORME AVANZA SU EDAD ES MÁS COMPLICADO SALIR A TRABAJAR

Recientemente Don Juanito estuvo hasta dos semanas en cama, sin generar ningún ingreso económico porque no podía levantarse a trabajar y aunque siempre ha tenido muy buena salud, por su edad una gripa prácticamente lo imposibilitó para salir.

Señala que acudió al médico, pero debido a que no tiene seguro popular, tuvo que pagar la consulta y no logró reunir dinero para el medicamento, tan solo pudo comprar algunos sueros que le recetaron para sentirse mejor.

Además tras quitarlo del lugar donde se ponía a tocar antes, ahora logra reunir menos dinero en este nuevo punto y prácticamente hay días que no tiene para comer.

Aunado a esto hace algunos meses fue estafado por una persona que le quitó sus pocos ahorros, un violín y algunos otros objetos, quién había prometido darle algunas laminas y material, además de un lugar para vivir sin cobrarle.

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