diciembre 13, 2024
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mayo 16, 2016 | 156 vistas

Alberto de la Garza/Enviado Especial

TAMPICO, Tam.- Lo que pudo haber sido una fiesta deportiva cambió totalmente de camino al desatarse la violencia en el Estadio Tamaulipas después de que el conjunto de la Jaiba Brava de Tampico-Madero perdiera la final por el ascenso a la categoría de plata del futbol mexicano ante los Potros de la Universidad Autónoma del Estado de México.

En esta ocasión fue un partido diferente, tal vez la liguilla del futbol mexicano ocasionó que el Estadio Tamaulipas no se llenara como en otras ocasiones, encontrándose a un 70 por ciento de su capacidad, aunque desde afuera de las instalaciones la fiesta comenzaba con la venta de playeras y artículos de la Jaiba.

Desde el primer minuto de acción los celestes se fueron con todo hacia el frente en busca de realizar el gol que los metiera de lleno por el título de la temporada, aunque los Potros que llegaron con la ventaja en sus manos, se defendieron de gran manera durante todo el encuentro.

Corría justo el minuto 19 de tiempo corrido cuando los Potros hicieron su primera llamada de atención tras un disparo desde fuera del área que fue a dar directo al travesaño de la portería defendida por Alejandro Vences, quien solamente observó cómo se salvó del gol en contra y continuar con vida en la final.

Tras esto, el equipo celeste dirigido por Mario García comenzó a tener el control del esférico en la media cancha, pero batallaban para lograr generar alguna jugada de peligro y llegar hasta línea de fondo. Al minuto 24, un jugador de Tampico cayó dentro del área y a pesar del reclamo de la afición, el silbante Brian González decidió no marcar la falta y continuar con las acciones.

Una vez más los Potros se hicieron presentes con una jugada de peligro pero ahora al 33 de tiempo corrido apareciendo Wilber Rentería desde fuera del área, pero en esta ocasión Alejandro Vences no tuvo problemas para atajar el disparo. Los minutos transcurrieron sin problemas, llegando el silbatazo del medio tiempo.

Para la parte complementaria y debido a la obligación de lograr el gol del empate en el global, la Jaiba Brava de Tampico se fue nuevamente con todo hacia el frente, metiendo a sus rivales en su propia cancha, que les daba para realizar algún contragolpe y poner en aprietos a los locales en varias ocasiones.

Apenas a los cinco minutos de haber reiniciado las acciones, los Potros de la UAEM tuvieron la más clara con Manuel Osorio quien se enfrentó en un mano a mano contra Alejandro Vences, pero sacó un disparo sin potencia ni colocación para desperdiciar la oportunidad en el segundo tiempo.

Los segundos continuaban pasando y la desesperación poco a poco comenzaba a notarse en el terreno de juego, pases imprecisos y brincando las líneas, Tampico así intentaba hacer daño a los Potros que se encontraban bien parados en la zona defensiva, evitando cualquier situación de gol, llegando enseguida el silbatazo final del partido.

De esta manera, Potros de la UAEM lograron quedarse con el título del ascenso de la Segunda División Premier tras vencer un gol por cero en el global a Tampico, por lo que sería el integrante número 18 en el Ascenso MX.

Y ESTALLÓ LA VIOLENCIA

Cuando justo festejaban los jugadores de los Potros al centro del terreno de juego y se preparaban para realizar la premiación correspondiente, la violencia estalló en el graderío del Estadio Tamaulipas justo en la zona de la porra Terrorizer, cuando algunos miembros intentaron ingresar a la cacha con la intención de agredir a sus rivales, teniendo que entrar a los vestidores los jugadores de Potros e irse del estadio.

La poca seguridad más el coraje por parte de los aficionados del sur de la entidad, provocaron que se saliera de control los problemas en las gradas, llegando hasta la cancha, teniendo que ingresar los aficionados para resguardarse, aunque miembros de la Terrorizer también ingresaron para buscar a los jugadores rivales y agredirlos, pero esto ya no sucedió.

Debido a la lenta respuesta de la seguridad responsable del estadio, los sujetos comenzaron a ingresar por las diferentes zonas del estadio, desatándose los golpes contra los policías, saliendo varios heridos, así como también mujeres que se encontraban disfrutando del espectáculo que se salió de control.

Después de cerca de una hora, fue controlada la situación dentro y fuera del estadio, dejando como saldo extraoficial un total de 40 aficionados heridos, así como también al menos una decena de detenidos dentro y fuera del inmueble.

 

 

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