octubre 19, 2024
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mayo 24, 2016 | 153 vistas

Alejandro Echartea

La tarde de este domingo 22 de mayo parecía como cualquier otra, el cielo lucía nublado pero con pocas probabilidades de lluvia, fue un día caluroso a comparación de los días previos; sin embargo, en un lapso no mayor de hora y media cayeron cerca de 3.5 pulgadas de agua, lo que ocasionó encharcamientos e inundaciones en por lo menos 12 colonias y un ejido conurbado.

Protección Civil estatal reportó que las colonias más afectadas fueron la Linda Vista, Sagitario, Liberal, Benito Juárez, Solidaridad, Laderas, Azteca, Agua Fría, Libertad, Villarreal, Jardín y Naciones Unidas, la mayoría de ellas al oriente de la ciudad, mientras que en el ejido Guadalupe Victoria serían cerca de 60 las viviendas más afectadas.

El alcalde Fernando Méndez Cantú visitó esta zona la mañana de este lunes, indicando que se buscaría acceder a recursos del Fondo Nacional de Desastres para ayudar a las familias afectadas, sin embargo, el consenso en la zona dice que este desastre se debió a algo más que la madre naturaleza, sino también a la mano del hombre.

“Estamos poniendo en operación los programas diseñados para estos propósitos, nos cayó este pelotón de agua, 3.5 pulgadas de agua en un lapso de 90 minutos y eso pone en crisis a nuestra comunidad por el plano inclinado que tiene”, indicó Méndez Cantú.

“Por el diseño del libramiento se represó el agua, no hubo manera de que pudiera desfogar, ahorita no hay agua ya pero en el momento crítico sí se inundó”, agregó el Alcalde capitalino.

 

 

GRAVES PÉRDIDAS DOMÉSTICAS: PC

El coordinador estatal de Protección Civil (PC), Medardo Sánchez Albarrán, indicó que la mayor parte de las afectaciones se debieron a la humedad hacia el interior de las viviendas por la pérdida de enseres domésticos, “afortunadamente, y hay que destacarlo mucho, no hay afectaciones hacia la población, de manera que todavía en la madrugada de ayer se pudo rescatar a cinco niños que se encontraban en una vivienda en este sector”.

El responsable de PC estatal señaló que esta localidad cuenta con una pendiente de poniente a oriente, siendo las colonias en este sector las más afectadas por los grandes escurrimientos de la sierra y las colonias de la parte alta.

La mañana de este lunes, trabajadores del Municipio y del Gobierno del Estado emprendieron el levantamiento del censo del número de los habitantes más afectados por esta inundación, mientras que personal de la Secretaría de Salud fumigó al interior de los hogares siniestrados para prevenir la proliferación del mosquito transmisor del dengue, chikungunya y zika.

 

FRACCIONAMIENTOS Y HOSPITAL REGIONAL PROPICIAN INUNDACIONES

En un recorrido por la zona siniestrada se observó un consenso entre los habitantes del ejido Guadalupe Victoria, quienes aseguran que hace más de 30 años este tipo de inundaciones no eran comunes sino hasta que fueron construidos el Hospital Regional de Altas Especialidades (HRAE) y unos fraccionamientos por la zona.

“Ya tenemos unos 15 años viviendo así, pero ahora sí fue más el agua, ahora sí se nos echó a perder todo, colchas, camas, refrigeradores, nada más la ropa que traemos puesta es lo único que alcanzamos a rescatar”, indicó el señor Manuel Fuentes, habitante de este lugar.

Don Manuel esperaba fuera de su domicilio a que el gas esparcido por los trabajadores de la Secretaría de Salud se dispersara para poder rescatar algo de la ropa humedecida, pero con pocas esperanzas de rescatar algo, “siempre pasamos así que llueve se nos mete el agua”.

Recuerda que en inundaciones anteriores el agua alcanzaba los 40 centímetros de altura, pero en esta ocasión alcanzó el metro, “de adentro no se va a rescatar nada, todo se echó a perder, ropa cobijas, todo”.

Don Casimiro González tomó la precaución de rellenar su terreno con casi un metro de tierra para edificar su humilde casa, pero esto no bastó para escapar de la enorme cantidad de agua que se acumuló en este sector.

“Se nos mojaron colchones y varias cosas que no sabemos si vayan a quedar buenas poniéndolas al sol, aquí en mi casa vivimos tres personas, un hijo, yo y mi mujer”, don Casimiro indica que la calle principal sirve como dren, pero destacó que los ductos para desahogar el agua resultaron insuficientes por lo que se creó una pequeña represa esa anoche.

“Como a las cuatro de la mañana se desahogó el agua, la laguna que estaba hasta acá, yo por eso aquí en mi casa rellené, pensé que con eso ya no subía, pero como quiera hasta donde subió ahora, como metro y medio”.

En cuestión de media hora se inundó el ejido impidiendo a sus habitantes poder rescatar sus pertenencias y llevarlas a un lugar a salvo, “además el jueves de la semana pasada cayó granizo y agua y chicoteó mucho los árboles de modo que hay muchas hojas secas y con este aguacero, lo tapó”.

Su vecino, el joven Israel Álvarez, miraba desconsolado su vivienda casi sin poder entender como de la noche a la mañana perdió las pocas posesiones con que contaba, “no hallábamos ni para donde jalar, todo se nos mojó, las camas, todo el ropero, los colchones están todos mojados, le tuvimos que poner unos hules para que los ‘morrillos’ se nos durmieran de perdido en éste”.

En un humilde cuartito vive en compañía de su esposa y dos hijos pequeños, a un lado en otro cuartito viven sus dos suegros y en el mismo predio otros familiares, todos resultaron afectados en sus posesiones.

“Todos los papeles personales se nos mojaron, mis zapatos estaban debajo de la cama y con el agua también se fueron, en puras chanclas me quedé”, a la entrada de las viviendas hay un pequeño borde de unos 40 centímetros, que era la altura tradicional del agua, pero en esta ocasión el nivel fue superior.

“Como a eso de las dos o tres de la mañana que se escurrió el agua pude empezar a sacar con botes el agua de la casa, pero pues todo se nos acabó”, Israel Álvarez se queja de que a varias horas del fenómeno todavía no había recibido la ayuda de las autoridades, esto a pesar de que a media cuadra los elementos de Protección Civil ya tienen camionetas con despensas, agua, y cobertores, “quisiéramos que nos ayudaran con colchones, con los útiles de los niños, con los zapatitos porque todo se fue, de perdido que nos den los de ellos para que sigan yendo a la escuela”.

 

CULPAN AL MUNICIPIO

De manera anónima, un ama de casa se queja de la falta de acción de las autoridades, indica que ésta no es la primera vez que le ocurre esto a su vivienda, y señala que en ninguna ocasión ha recibido ayuda, “esto lo hemos vivido de años, pasa un candidato, pasa un presidente y pasa un gobernador y nunca se hace nada, yo tengo 30 años viviendo aquí y lo he vivido siempre, claro que no a esta magnitud”.

La señora con voz quebrada hace un alto en la labor de rescate de sus posesiones, quizá más por cansancio que para dar a conocer su historia, “esto es por las construcciones que han hecho, porque todo el desahogo lo avientan para acá y no le dan mantenimiento al dren, que lo andan poniendo muy bonito con piedritas, pero en lo principal no”.

El ama de casa pidió a las autoridades que se haga una obra para desahogar el agua que escurre a este sector desde los fraccionamientos de alrededor y de las colonias de la parte alta de la ciudad, “que pongan atención más que nada en el dren, en las construcciones nuevas que andan haciendo, ¿por qué perjudicarnos a nosotros si el ejido aquí tiene más tiempo que esas construcciones? Pudiéndola aventar al dren, ¿por qué aventárnosla a nosotros? El dren va al río, ¿por qué aventárnoslo a nosotros?”, cuestionó.

 

VECINOS CONTEMPLAN EL DESASTRE

La señora María Antonia Ramírez y su hijo Daniel Ruiz observan un poco retirados la tragedia de sus vecinos, si bien se vieron afectados por la inundación al menos cuentan con el beneficio de vivir en una casa de doble piso, lo cual les permitió rescatar algunas de sus posesiones.

“Pusieron un drenaje muy chiquito y ahora el agua se sale por la coladera, aparte del agua de la lluvia la de adentro del drenaje”, mencionó la señora María Antonia, “ya se lo pedimos al Municipio, al Gobierno, al que le toque arreglar”.

El señor Daniel Ruiz recalcó que hace años esto no era frecuente, sino hasta que se vino a construir el HRAE y los fraccionamientos aledaños, “desde que hicieron esos fraccionamientos nuevos toda esa agua nos la aventaron para acá, y esa carretera nos forma una presa porque le faltan conductos que salgan al canal porque los que habían se taparon y todo eso va formando una presa y por eso se inunda aquí, mi abuela vivió aquí por años y nunca se inundó, nunca hubo un problema de agua así, pero fueron haciendo fraccionamientos y toda el agua nos la echaron a nosotros”.

Fuera de su vivienda, el señor Juan Manuel Ramos Vázquez espera que alguien llegue a ofrecerle ayuda, en su casa el agua alcanzó 1.30 metros de altura dañando prácticamente todas sus posesiones, “lo malo es que taparon las salidas (del agua) cuando hicieron el hospital, nos taparon tres salidas de agua y nada más nos dejan ese canal del centro y el agua, por eso no le tenemos miedo al agua que escurre, sino a la que se regresa”.

Como todos sus vecinos, don Juan Manuel coincide en que es necesaria una obra para poder desahogar el agua del ejido, “la salida la taparon, ahí están las salidas para abajo, son tres puentes que cerraron con la carretera para no lastimar el hospital, yo tengo 30 años aquí y nunca se había metido esta agua hasta ahora que se hizo el hospital”.

 

‘NO SE POLITIZARÁ LA AYUDA’, REGIDORA MIRNA MEDINA

La regidora de Desarrollo Rural en el Cabildo local, Mirna Imelda Medina Montelongo, aseguró que acompañará a los trabajadores de Protección Civil y del Ayuntamiento para hacer el levantamiento de los damnificados para que todos los vecinos del sector obtengan la ayuda necesaria.

“Estamos pidiendo que se ayude a la gente afectada en sus enseres domésticos, esa es la intención, ahorita van a pasar unas brigadas a levantar los censos de todo lo que se ha perdido”.

Recordó que este es un problema recurrente en aquel sector, “hay compañeros que siempre que llueve mucho se les afecta, hoy fue de más agua en 90 minutos, alrededor de tres pulgadas y media lo que antes no se había visto, y ahorita estamos esperando a que se haga el censo para que se apoye a toda esta gente”.

La regidora de extracción priista aseguró que se buscará entregar los apoyos a todos los habitantes del ejido, independientemente del partido en el que militen, esto en respuesta a algunos señalamientos que se hicieron por parte de los mismos vecinos, “aquí tiene que ser parejo, porque sí hubo más gente damnificada, aquí voy a estar yo al pendiente, incluso voy a estar caminando con la gente del Gobierno del Estado para que a toda la gente se le tome en cuenta”, aseveró.

“Aquí no venimos a ser protagonistas porque ahí vienen las elecciones, aquí es solidaridad con los compañeros que perdieron todo, no es para hacer campaña ni hacer política”, finalizó la presidenta de Desarrollo Rural en el Cabildo capitalino.

 

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