BUENOS AIRES, Argentina, mayo 30 (Notimex)
El asesinato de tres niñas de 12 años en Argentina incrementó la alarma por los feminicidios en una semana en la que se realizará la segunda marcha “Ni una menos” para denunciar la violencia machista.
Milagros Daiana Torres, una niña de 12 años que vivía en la norteña provincia de Tucumán, fue asesinada por su padrastro, quien la ató de manos y pies, además de que le puso un trapo en la boca.
En la ciudad de Bahía Blanca, ubicada en la provincia de Buenos Aires, un joven de 23 años confesó haber estrangulado a Micaela Ortega, de 12 años, a quien engañó después de conocerla a través de un perfil falso en Facebook.
Hasta ahora se desconoce si ambas víctimas fueron violadas, ya que las autopsias no han concluido.
La semana pasada Guadalupe Medina, de 12 años, fue asesina y violada en Rosario, pero su caso pasó desapercibido en los medios porque la niña vivía en una villa miseria y los crímenes en las clases bajas son abordados desde miradas clasistas que les restan importancia.
Hasta Argentina repercutió también la conmoción por la historia de una adolescente brasileña de 16 años fue violada por 30 hombres que luego subieron imágenes del ataque a las redes sociales.
El juez de la causa le preguntó a la niña si acostumbraba tener relaciones sexuales grupales, lo que provocó exigencias sobre su dimisión ante la evidente visión machista con la que está llevando a cabo la investigación.
La víctima, en tanto, reconoció en una entrevista que “sentí culpa, varias veces, hasta ahora. Todo el día. No sé de qué. Siento basura saliendo de mi cuerpo, de mi boca, de mis ojos”.
Los feminicidios volvieron a ocupar así lugar en los medios en vísperas de que se cumpla el primer aniversario de la marcha “Ni una menos” que un colectivo de periodistas, escritoras, artistas y activistas convocó el 3 de junio del año pasado y que tuvo una asistencia histórica.
Para conmemorar la fecha y denunciar la falta de políticas para prevenir los feminicidios y la violencia machista en general, miles de personas volverán a salir el próximo viernes para copar las principales plazas de Argentina.
En medio de la alerta lanzada por la falta de equidad, también fueron criticados en las redes sociales dos comerciales del gobierno que forman parte de su campaña para unir a los argentinos.
El problema es que los spots, que enumeran la participación ciudadana que se necesita para hacer una empanada o mejorar calificaciones, las mujeres son escasas y ocupan roles tradicionales como el de la abuela, la mamá, la costurera y la maestra.
Los hombres, en cambio, son mostrados como ganaderos, veterinarios, empresarios, comerciantes, camioneros, ministros, gobernadores, intendentes y arquitectos.
La organización Economía Feminista ya denunció que los estereotipos de género refuerzan la desvalorización de la mujer e implica una violencia simbólica.