SAN JOSE, California, EE.UU. (AP) — Varios partidarios de Donald Trump que salían el jueves de un mitin del candidato republicano en San José se vieron atacados por manifestantes, algunos de los cuales propinaron puñetazos y lanzaron huevos.
Una docena o más de personas recibieron golpes, y los agresores rompieron también ventanas de automóviles. Los inconformes arrebataron gorras con lemas en apoyo de Trump y las prendieron fuego en el suelo. Al menos una mujer recibió el impacto de un huevo.
La policía mantuvo el perímetro al principio, pero después de unos 90 minutos avanzó hacia la gente que quedaba para dispersar la protesta y hacer detenciones. Al menos cuatro personas fueron detenidas, aunque la policía no ofreció datos totales el jueves por la noche. Un agente fue agredido, dijo el sargento Enrique Garcia.
No había información sobre heridos en un primer momento y no se registraron daños importantes a la propiedad, señaló la policía.
La protesta, que había alcanzado las 300 personas justo antes del mitin, se redujo considerablemente al avanzar la noche. Los alborotadores y enfadados se quedaron cerca del centro de convenciones de San Jose.
Algunos golpearon los automóviles de los seguidores de Trump cuando salían del mitin, y persiguieron a los que se iban a pie para asustarlos.
La policía mantuvo las distancias con la multitud mientras se desarrollaban los altercados, pero les impidió acercarse más al centro de convenciones.
«Nuestros agentes de policía han hecho un trabajo extremadamente valiente y profesional hasta ahora», indicó por teléfono a Associated Press el alcalde de San Jose. «Todos seguimos conteniendo el aliento hasta ver el final de esta peligrosa y explosiva situación».
El alcalde, demócrata y partidario de la aspirante Hillary Clinton, criticó a Trump por viajar a ciudades y avivar problemas con los que tiene que tratar la policía local.
«En algún momento, Donald Trump tiene que asumir la responsabilidad por el irresponsable comportamiento de su campaña», afirmó Liccardo.
Es improbable que esas protestas se repitan el viernes, cuando Trump celebre un mitin en el aeropuerto de la mucho más pequeña y conservadora localidad de Redding, unas 150 millas al norte de Sacramento.
Clinton y su rival demócrata, Bernie Sanders, también tenían previsto celebrar actos en el estado el viernes con vistas a las primarias de California del próximo martes.
Trump, el probable candidato republicano a la presidencia, habló durante unos 50 minutos en el mitin, criticando a Clinton y describiendo como «patético» y «triste de ver» el discurso sobre política exterior que había ofrecido antes el jueves la aspirante.
Uno de los que acudieron a protestar contra el discurso fue Adam Rivas, un estudiante universitario de 22 años nacido y criado en San Jose, que mostraba una pancarta escrita con aerosol que invitaba a «botar a Trump».
Rivas dijo estar especialmente molesto por las declaraciones de Trump sobre mexicanos.
«Por cada mexicano aquí al que critica, hay unos 20 mexicanos ahí fuera que trabajan duro y sólo hacen su trabajo», dijo.
La partidaria de Trump Debbie Tracey, veterana de la Marina estadounidense y procedente de San Jose, acudió al acto a escuchar a Trump y se marchó con dos gorras y una camiseta de apoyo, así como un puñado de carteles que decían «Veteranos por Trump».
Al pasar junto a un grupo de manifestantes, muchos de los cuales coreaban lemas en español, dijo apoyar la propuesta de Trump de levantar un muro en la frontera entre México y Estados Unidos.
«Ayudaré a levantar el muro porque si usted va a venir a este país, tierra de oportunidades, debe estar aquí de forma legal», dijo.