CIUDAD DE MÉXICO, junio 3 (Agencias)
A Jaime Camil le da risa cuando los estadounidenses lo reconocen en la calle. “‘¿Rogelio?’, es lo que me preguntan cuando me ven; porque los latinos me llaman Jaime y no por el nombre de mi personaje”, confiesa divertido el actor.
Por dos años, Camil ha dado vida a Rogelio de la Vega, una “súper estrella de las telenovelas” que es padre de Jane en la serie Jane the Virgin. Gracias a lo cómico de su personaje, el actor no sólo ha logrado ser del gusto del público latino y estadounidense, sino que le ha dado la oportunidad de estar nominado a premios y ahora de debutar en Broadway.
“Definitivamente la oportunidad de estar en Chicago es parte de lo que se ha cosechado gracias al trabajo en Jane the Virgin, incluso en el cartel ponen mi nombre junto al de la serie”, explica el también cantante luego de su presentación en el escenario al interpretar a Billy Flint.
Camil reconoce que las experiencias que ha tenido en Estados Unidos, desde la televisión hasta el teatro, le dan la oportunidad de mantener a su familia. Con dos hijos y una esposa, el histrión reconoce que irá a donde le ofrezcan empleo. Ya sea en tierra anglosajona, de vuelta en México o en España, él seguirá trabajando.
Por el momento está a punto de volver al set de grabación para la tercera temporada de Jane the Virgin que se transmite en México por Lifetime. Además presume que Jennie Snyder Urman, la escritora, está tan contenta con la evolución de su personaje que le dará más atención a Rogelio de la Vega en los nuevos capítulos.
AMNESIA
A Jaime Camil le pasó en su debut lo mismo que dice la canción de moda interpretada por Maluma: “Borro Casette”. El actor confiesa que la adrenalina le ha hecho no recordar nada de las primeras escenas en su debut en Broadway.
Con el papel de Billy Flint, el mexicano se subió al escenario de Broadway para cantar, bailar y actuar, todo al mismo tiempo.
En el elenco también está la mexicana Bianca Marroquín, quien ha dedicado la mayoría de su carrera al teatro musical y, según Camil, fue una de las personas que más le apoyó luego de que se integró al musical.
“Lo que es muy bonito del teatro es que aquí no hay etiquetas, que si vienes de cine, de la televisión o de cualquier lugar, no importa, aquí todos te reciben bien”, detalló.
Incluso ser parte de la ola de latinos que están teniendo mayor espacio en las producciones estadounidenses le da la oportunidad de abanderar a nuestro país.
“Me llena de orgullo poder traer a México (a Nueva York) y representarlo bien, con mi trabajo y con lo que se está logrando”, dijo Camil, quien estará en la temporada de Chicago, que se presenta en Broadway, sólo espera poder coordinar su agenda.