Israel Reséndiz CIUDAD MANTE, Tam.-
Una serie de apagones intermitentes de energía eléctrica, provocó la irritación de quienes esperaban por una consulta, un servicio administrativo o simplemente una aclaración a cerca de su situación con la institución medica, pero donde más fue resentido el desperfecto técnico, pudo notarse en quienes se encontraban formados desde hacía varias horas en espera de su medicamento en farmacia.
La derechohabiencia en general quienes llegaban desde el primer minuto hábil ayer por la mañana, consideraba determinada cantidad de tiempo para entrar y salir del inmueble e incorporarse a otros menesteres, cuando comenzó la variación del voltaje que posteriormente, mostró apagones por lapsos y posteriormente el servicio era aparentemente reestablecido de manera normal.
La situación no se hizo esperar por algunas personas inconformes con ello, y comenzaron a denunciarlo a través de las redes sociales, solicitando la intervención de quien corresponda para reestablecer este desperfecto, en donde manifestaban que principalmente, la fila para solicitar los medicamentos necesarios previa receta, era la que menos avanzaba, y todo ello sin importar la estancia de ese momento de personas enfermas o de la tercera edad, que independientemente de esa condición, pasaron hora sin probar alimento por la mañana.
El Instituto Mexicano del Seguro social ha sido una institución muy criticada en los últimos años, pues hoy en día sigue dejando mucho que desear, desde su servicio que depende de un grupo de trabajadores desde médicos hasta intendentes, todos con tendencias de burócratas y poco profesionales así como nada comprometidos con la función que deben hacer, que es dotar del servicio a los trabajadores que sufren un descuento quincenal en su nómina para contar con este beneficio.
A todo este panorama se le suma la falta de presupuesto que ha generado algunas otras carencias como es la falta de medicamentos en algunas etapas del desempeño de instituciones como esta que funciona como clínica de consulta, y ahora las cuestiones técnicas que denotan equipo que si bien es cierto es de buena calidad, no se le ha dotado del mantenimiento necesario como las plantas de emergencia, para que puedan solventar el desperfecto mientras se reestablece por completo el servicio.
Mientras el equipo, la atención y el servicio se deteriora, el IMSS a nivel nacional sigue desembolsando millones de pesos en nóminas de personas que sin especificar casos, ni si quiera desquitan todo lo que ganan sea cual sea la función para la que están designados en hospitales y clínicas.
