WASHINGTON, EU., junio 22 (Notimex)
El Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendó a Estados Unidos adoptar una reforma migratoria integral para paliar el impacto de la disminución de la fuerza laboral y responder así a los importantes retos de largo plazo que enfrenta su economía.
Aunque la economía estadounidense se encuentra en general en una buena situación gracias a la reducción del desempleo y la contención de la inflación, el organismo multilateral estimó que pese a estos logros “el crecimiento fuerte y sostenido enfrenta desafíos a más largo plazo que pueden ser significativos.
Al presentar este día su informe anual sobre el estado de la economía estadounidense, conocido como artículo IV, el fondo señaló que las perspectivas de crecimiento estan expuestas a riesgos en ambas direcciones.
“El informe más reciente sobre el empleo siembra la inquietud de que el crecimiento de Estados Unidos podría estar perdiendo ímpetu”, dijo el fondo en su evaluación, si bien hizo notar que algunos indicadores apuntan ya a una reaceleración.
El año pasado fueron creados dos millones 400 mil nuevos empleos y la tasa de desempleo se ubica ahora en 4.7 por ciento, siendo éste el nivel más bajo desde las vísperas de la última gran recesión del 2007 al 2009.
De acuerdo con las proyecciones del fondo, la economía estadounidense sufrirá este año una ligera desaceleración creciendo a 2.2 por ciento del PIB, comparado con el 2.4 por ciento del 2015, aunque se espere que repunte a 2.5 por ciento en el 2017.
“Un riesgo que resulta más complicado evaluar es la posibilidad que las recientes cifras que indican un debilitamiento de la actividad en realidad obedezcan a una tasa de crecimiento potencial más baja y una brecha del producto más reducida de lo que se había estimado”, apuntó.
Si estas tendencias se confirman, eso significaría que la economía podría enfrentar cada vez más limitaciones de capacidad, e implicaría que, con menos capacidad ociosa en la economía, a corto plazo podrían surgir presiones inflacionarias más pronunciadas que harían necesario un alza más contundente de las tasas de interés, advirtió.
“De materializarse, este riesgo podría tener importantes repercusiones negativas en la economía mundial debido al menor crecimiento de Estados Unidos y las tasas de interés más altas”, apuntó.
Otro de los factores que podría complicar el escenario en el corto plazo es la disminución de la participación en la fuerza laboral, consecuencia inevitable del envejecimiento de la población, a pesar de lo cual estimó que los efectos demográficos pueden ser mitigados.
Entre las medidas propuestas por el fondo para incentivar el trabajo, el FMI mencionó la adopción de prestaciones familiares como mecanismo de política para desacelerar la tendencia descendente de la participación femenina en la fuerza laboral.
“Quizás el mayor efecto en la oferta de mano de obra provendría de un acuerdo en torno a una reforma de la inmigración basada en las aptitudes, que altere las tendencias demográficas subyacentes, que reduzca la tasa de dependencia y que incremente el nivel de capital humano en la fuerza labora”, refirió.
Resaltó también que la inflación permanece contenida, y la economía estadounidense ha demostrado una y otra vez su capacidad de resistencia ante la volatilidad del mercado financiero, el fortalecimiento del dólar y la debilidad de la demanda mundial.
El fondo consideró que las políticas fiscal y monetaria a corto plazo se han ajustado adecuadamente a las circunstancias económicas imperantes, aunque advirtió que tendencias demográficas y las tasas de interés en alza provocarán mayores desequilibrios fiscales a mediano plazo.
Anticipó que la deuda federal empezará a aumentar en 2019, y para 2022 se situará por encima del 80 por ciento del PIB, por lo que se hace más necesario un plan de consolidación fiscal a mediano plazo que impida este nuevo aumento de la deuda pública.
Frente a este escenario, el FMI estimó necesario una reforma tributaria integral que procure eliminar las exenciones, simplificar el sistema, lograr un reequilibrio de los impuestos directos a los indirectos y reducir las tasas legales de los impuestos sobre la renta de personas y empresas.
Para el fondo, la reforma sobre la renta de las empresas es muy necesaria y podría ayudar a reactivar el dinamismo de las empresas y la inversión.
