Cuando regresaba de comprar una cerveza con la que se iba a comer un pollo asado en su domicilio, ubicado a 20 metros del lugar, un peatón perdió la vida de manera instantánea tras ser arrollado por un motociclista en el cruce de la avenida Rotaria y calle Flores Magón.
Automovilistas que pasaban por el lugar llamaron al número de emergencia 066 para dar a conocer los trágicos acontecimientos.
Una vez recibida la llamada, al lugar acudieron paramédicos de la Cruz Roja para brindarle los primeros auxilios al vendedor de hot dogs de nombre Braulio “N”, de 32 años de edad, quien yacía tendido en el piso sobre la superficie de rodamiento.
A Braulio, quien al momento de los hechos se dirigía a su domicilio, ubicado a media cuadra del lugar del percance, a la llegada de los paramédicos ya no le encontraron signos vitales declarándolo muerto debido a la fractura de cráneo que sufrió además de otros golpes en el cuerpo.
Por su parte, el perito de Tránsito local en turno acudió al lugar para tomar conocimiento del percance, el cual se registró a las 15:30 horas del pasado viernes.
De acuerdo con la dinámica de los hechos que se pudo establecer en el lugar, Braulio acababa de salir de una tienda de conveniencia ubicada a unos metros del percance, cuando al tratar de cruzar en sentido de norte a sur el bulevar Hombres Ilustres es embestido por una motocicleta marca Kurazai modelo 2015 que circulaba en sentido de oriente a poniente.
Dicha motocicleta era tripulada por Ignacio “N”, quien tras ser valorado por los técnicos en urgencias médicas se determinó su traslado al Hospital General debido a que resultó lesionado en el fatal accidente.
Cabe señalar que el personal de la unidad de Investigación en turno tardó alrededor de una hora en llegar al lugar para dar fe del cuerpo de la persona fallecida, así como para llevar a cabo la diligencia de fe ministerial y levantamiento de cadáver, tiempo durante el cual la avenida Rotaria registró un considerable embotellamiento vehicular debido a que los dos carriles de dicha arteria se encontraban cerrados a la circulación vehicular y los vehículos transitaban por el acotamiento, pues el cuerpo del occiso quedó en medio de la calle.