Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Las cuentas públicas que hayan sido aprobadas por el Congreso del Estado nunca caducan, porque pueden reabrirse en cualquier momento en caso de que se detectaran posteriores irregularidades en el ejercicio fiscal, afirmó Ramiro Ramos Salinas.
«Lo que se ha aprobado puede volver a abrirse. No crean que porque un Congreso aprueba una cuenta pública ya es letra de oro. Siempre se puede abrir cualquier cuenta, de cualquier municipio, ente público y de cualquier año» detalló el presidente de la Junta de Coordinación Política y de la Diputación Permanente.
Aclaró, sin embargo, que en caso de detectar irregularidades en una cuenta pública ya aprobada, la responsabilidad no sería de los diputados porque lo que estos hacen es solamente dictaminar un informe emitido por la Auditoría Superior del Estado.
Además de ello, dijo, los diputados no tienen «ni aquí ni en ningún lugar del mundo», la capacidad para revisar estados de cuenta, cheques, facturas, recibos de nómina o contratos de obra pública.
En consecuencia, los diputados no serían responsables de no haber detectado algún desvío presupuestal que se descubra en el futuro.