Tokio— La videograbadora VCR (videocaseteras) va camino de terminar como los disquetes de computadora, los cartuchos de ocho tracks y los rollos para cámaras fotográficas tras el anuncio del último fabricante, la japonesa Funai Electric, de que dejará de fabricar el aparato.
La compañía justificó su decisión por la fuerte caída de las ventas y dejará de fabricar a finales de este mes sus videograbadoras VHS en su planta de China.
«Una compañía que estaba fabricando componentes para nosotros nos dijo que era muy difícil seguir fabricándolos con un nivel tan bajo de ventas y decidieron detener lo producción, lo que nos llevó a tomar nuestra decisión», dijo el viernes un portavoz de la compañía.
Funai había llegado a vender 15 millones de VHS al año, una cifra que en 2015 sólo fue de 750.000.
En los últimos años la compañía vendía la mayoría de sus VHS en América del Norte, algunos con la marca Sanyo.
La demanda proviene principalmente de consumidores que tienen grandes colecciones de cintas de video que solo pueden ser reproducidas en VCR. Una encuesta de hace unos años dirigida por Gallup revelaba que el 58% de los estadounidenses todavía tenía un VCR en casa.
Las videograbadoras se hicieron inmensamente populares en la década de los 1970 y 1980 pero fueron sustituidas progresivamente por los DVD o los servicios de streaming.
Tras la decisión de Panasonic hace unos años de dejar de fabricar VHS, Funai era la última compañía que los producía.
La empresa ha recibido multitud de llamadas de propietarios japoneses de cintas VCR que todavía no han copiado sus grabaciones de bodas u otros acontecimiento especiales a otros formatos, agregó el portavoz.
Quizá Japón tenga reputación de estar a la última en tecnología por sus aparatos y sus robots futuristas, pero mucha gente sigue optando por viejos aparatos en su vida diaria, como el fax o teléfonos celulares con tapadera.
Las cintas de casete todavía son populares y las cadenas de alquiler de DVD siguen presentes en las ciudades japonesas.
Sony había abandonado a su vez en 2002 la producción de grabadoras Betamax y el año pasado anunció que dejaría de fabricar las cintas de este sistema, rival del VHS, desarrollado por otro fabricante de electrónica Japonés que acabó formando parte de JVC años después.
Con todo, también el VHS acabó perdiendo la batalla a medida que las cintas de video fueron remplazadas por otros formatos digitales, como el DVD, que, al final, también está siendo sustituido por la tecnología de emisión en continuo.