diciembre 11, 2024
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agosto 3, 2016 | 127 vistas

Clemente Zapata M.-

Concesionarios del Transporte Público en Victoria advierten un severo impacto económico con el nuevo aumento al costo de los combustibles, asegurando que cada vez es menos rentable la prestación del servicio; temen un aumento de insumos.

En entrevista, José Alfredo Jiménez García, presidente de la Unión de Concesionarios del Transporte Público, descartó por el momento plantear un aumento a las tarifas del pasaje, sin embargo, habrán de analizar las afectaciones que provoca en el sector la decisión de las autoridades hacendarias.

“A todos nos afecta, todo se nos va otra vez arriba, todo afecta a automovilistas y transportistas, en refacciones, con más razón a todos los que utilizamos gasolina, ojala que no tengamos que afectar al usuario”, dijo.

Reconoció que los bolsillos de los usuarios del servicio ya no aguantan otro incremento, sin embargo, también es cierto que las finanzas de los permisionarios se ven dañadas, y más aún cuando se tiene la exigencia de las autoridades de mantener la modernización que establece la Ley vigente.

Jiménez García dijo que están atentos al impacto negativo que tendrá este nuevo “gasolinazo”, que ya de por sí con la situación del dólar que ha tenido variaciones, les ha pegado con la compra de refacciones y llantas, a lo que se suman los gastos por operatividad diaria.

La organización que representa cuenta con una flotilla de 250 unidades que atienden varias rutas y ya comenzaron a evaluar cómo aminorar las afectaciones, sin embargo, apenas comienzan a ver esa situación.

De acuerdo al entrevistado, una unidad del servicio del transporte público deja un ingreso diario de entre mil 800 y dos mil pesos; sin embargo, de esa cantidad, al menos el 50 por ciento corresponde a la compra de combustible para poder salir a atender a los pasajeros.

Del restante 50 por ciento, explicó, se tiene que pagar el sueldo del operador, los gastos diarios en vulcanizadoras, eléctricos y mecánicos, además de destinar ahorro para insumos más fuertes como las llantas, suspensiones.

“Lamentablemente es un impacto muy fuerte y todos lo sabemos, por eso estamos pendientes de cómo nos empieza a afectar, la realidad es que cada vez es menos la ganancia que deja el ser transportista”, dijo.

Jiménez García adelantó que en próximas semanas buscará la forma de reunirse con homólogos de otras organizaciones a fin de llevar a cabo un intercambio de opiniones respecto de estos temas.

 

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