Alejandro Echartea.-
En las pasadas dos semanas del período de vacaciones de verano, la Procuraduría del Menor y la Familia del Sistema DIF Victoria atendió 50 casos por diversos tipos de violencia intrafamiliar, siendo la principal causa la violencia económica.
Esto lo declaró la procuradora de esta instancia, Dulce María Macías Palomino, “fueron 50 personas que se estuvieron asesorando y realizando algún trámite que realizamos en Jurídico Integral”.
De estos 50 casos 40 fueron por violencia económica, como lo es el abandono de obligaciones de parte de los padres de familia, “el 90 por ciento es violencia económica, ya hemos hablado anteriormente sobre esto, que en estas temporadas es cuando impera la violencia económica, regularmente vienen a lo de la manutención para sus hijos o de las parejas o bien por los abuelitos que ha repuntado”.
No obstante, adelantó que las fechas próximas al período de inscripción al ciclo escolar es cuando el número de denuncias por esta causal aumenta hasta en un cien por ciento, “en el período vacacional acudieron un sinnúmero de gentes, pero esperamos más, ayer que reiniciamos labores sí tuvimos muy fluida las asesorías y esperamos en este período de antes de ingresar los niños a las escuelas a que vengan las personas”.
Podrían aumentar hasta a 80 casos de violencia económica los que atienda la Procuraduría del Menor y la Familia del Sistema DIF en Ciudad Victoria, recalcó.
Por otro lado, Macías Palomino indicó que este mes de agosto pudiera verse también un incremento en el número de denuncias por abandono de personas de la tercera edad, “hay familiares que le dejan la carga a un solo hijo, siendo a veces familias de diez hijos que no quieren ayudar económicamente a su padre o a su madre y se lo dejan únicamente a un hermano, refiriendo que porque es el consentido”.
Indicó que muchos de los casos son las mismas personas mayores quienes acuden hasta esta instancia para denunciar a sus familiares por abandono, “estas personas vienen para concientizar a los demás parientes, o demás familiares, que tengan un poquito más de responsabilidad con las personas de la tercera edad”.
