Frustrado por el desenlace que tuvieron para él los Juegos Olímpicos de Río 2016, el boxeador tamaulipeco Raúl Curiel charló en exclusiva con ESPN Digital acerca de los sucesos recientes que no le permitieron combatir en el Pabellón de combates de Ríocentro, y destacó que no quiso poner en riesgo su salud. Una gastroenteretis, causada por un cuadro de deshidratación, poco alimento y mucho estrés, fue finalmente lo que ha dejado fuera al mexicano de competencia. Descartó que su problema haya sido por no dar el peso y aceptó que se ha fallado a sí en su sueño de conquistar una medalla en Juegos Olímpicos.
-¿Cómo estás emocionalmente después de no subir al ring?
Pues yo me siento, siento que me fallé y siento que aparte pues, no sé si yo tuve la culpa de lo que haya pasado, pero mi cuerpo no me respondió y no estaba queriendo ni mucho menos defraudar a nadie, pero nunca voy a jugar con mi salud y creo que eso es lo más importante.
-¿Qué fue lo que pasó, cuando te empezaste a sentir mal?
Yo creo que ahí tuve la culpa yo porque era de días, ya de días había tocado el peso y estaba manteniéndolo, tuve el error de decirle a mis profes (sic), más que nada al profe (Francisco) Bonilla, fue algo que no supe manejar y fue mi responsabilidad, pero creo que, bueno, como te digo, nunca voy a jugar con mi salud y mucho menos en una pelea de boxeo de este nivel. Me sentía mal de hace tiempo y mi error fue no avisarle a mis profes.
-¿Para no pelear me imagino que tu estado de salud era grave, sentiste desfallecer, qué sentiste?
Tuve una descompensación, gastroenteritis también, infección en el estómago que se me hizo con el tanto cuidado que tuve de mi comida, no estaba comiendo, estaba marcando el peso, me estaba manteniendo y siento que igual con, no sé, el estrés, todo esto que se me fue juntando, entonces antier me estaba sintiendo mal y, ayer, que acudí al servicio médico, cuando me revisaron se supone que todo estaba bien, pero en mi persona yo sentía muy mal, me hidrataron, tomé mucha agua, tomé electrolitos, y pues bueno, las cosas se complicaron en la mañana, digo, yo como quiera estuve trabajando, haciendo lo posible, pero optamos mejor por no arriesgar mi salud.
-¿Qué mensaje le mandas a los fans en México, a tu familia?
Mi familia está completamente consciente, fueron los primeros a quienes se los consulté, quiero que las cosas queden claras, yo cumplí con lo que tenía que cumplir, mi salud estaba en juego y no iba a jugar con ella, quiero que no se hagan comentarios fuera de lugar pensando que es por el peso, pensando que porque no venía entrenado, que no quise pelear, la gente me conoce y sabe el tipo de persona que soy, el tipo de peleador, no quiero que las cosas se vayan a malinterpretar, tal cual como lo dijo el médico es como las cosas pasaron y pues bueno, tengo que ver qué va a pasar conmigo, con mi carrera, esperamos que Dios nos de la sabiduría de tomar una buena decisión.
-¿Te quedarías otro ciclo por tu juventud o vendría el profesionalismo?
La verdad no tengo cabeza para tomar una decisión ahorita, es una meta que no pude cumplir, estoy muy frustrado, me siento desmoralizado con mi persona, lo voy a consultar con mi familia y veremos qué pasa con mi futuro en el boxeo.
-¿En lo emocional, te sientes devastado?
No estoy devastado, traté de hacer lo que pude, no le fallé en nada, a mí sí siento que me fallé, yo creo que la gente sabrá entenderme y sabrá apoyarme, que es una situación muy difícil para mí y más que la gente no se haga ideas tontas ni trate de especular estupideces, quiero dejar en claro lo que pasó en realidad y hay que seguir adelante, esto sigue, soy joven, y estaremos pensando en una decisión.
-¿Pudo haber sido algún alimento o producto de la deshidratación y el estrés?
Yo creo que fue todo eso, mis compañeros estuvieron viviendo conmigo, ellos se daban cuenta que yo con el peso lo estaba marcando bien, creo que fue la descompensación que tuve, es peso (64 kg) que me está costando mucho marcar, por mi estatura, por mi edad, estoy creciendo, no estoy especulando nada ni diciendo nada, espero que las cosas vayan por lo mejor, vamos a ver qué pasa.