BATON ROUGE, Louisiana, agosto 18 (Notimex)
Las históricas lluvias que azotaron Louisiana han ocasionado 13 muertos, daños a 40 mil casas y miles de familias damnificadas, informaron hoy medios locales.
Unas once mil personas pasaron una noche más en refugios y se espera que el secretario de Seguridad Territorial, Jeh Johnson, visite las zonas afectadas este jueves, anunció la cadena ABC News.
Autoridades confirmaron la noche del miércoles dos muertes más en Livingston Parish, que se suman a las dos registradas en St. Helena, cinco en East Baton Rouge, tres en Tangipahoa y una en Rapides Parish.
Johnson revisará la respuesta del Gobierno federal a las inundaciones, lo que ha llevado a unas 70 mil personas a registrarse para recibir asistencia individual. Más de nueve mil han presentado reclamaciones de seguros contra inundaciones.
Unas 40 mil casas se han visto afectadas por las inundaciones, calificadas por el gobernador, Edwards Bel, “sin precedentes” que afectaron zonas de Baton Rouge y Lafayette.
Unas once mil personas se encontraban en albergues, según el informe, y ante la emergencia se espera que el presidente Barack Obama declare el estado de emergencia para la zona.
Pese a que no llueve desde el lunes pasado, las aguas acumuladas hacen difícil la situación para los residentes y ahora ha surgido el temor de infecciones como el virus del Nilo debido al agua estancada, de acuerdo con el reporte de ABC News.
En la zona de Vermilion Parish, en el sur de Louisiana, las autoridades pidieron a los residentes evacuar el área debido a la crecida de las aguas.
El jefe de Bomberos de la zona, Evans Bourque, dijo que la evacuación afecta a unas 60 o 70 casas y a unas cien personas.
Autoridades creen que este es el mayor problema de vivienda que enfrenta el estado desde que el huracán Katrina azotó la entidad hace una década.
Muchas personas cuyos hogares han sido habitados durante décadas han tenido que dejar todas sus pertenencias detrás y alojarse con familiares, amigos o dormir en remolques en medio del lodo y el riesgo siempre presente del moho en sus hogares, las infecciones y el tórrido calor de agosto.