NUEVA YORK, EU., agosto 25 (Notimex)
La violencia del grupo islamista Boko Haram en la cuenca del lago de Chad, en África, ha desplazado a 1.4 millones de niños, además casi medio millón sufre desnutrición aguda, reportó hoy el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Asimismo, al menos un millón de niños se encuentran atrapados en zonas de difícil acceso, alertó Unicef en un informe publicado antes de la celebración de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre Refugiados y Migrantes, que tendrá lugar el próximo 19 de septiembre.
“La crisis del lago Chad es una crisis infantil que afecta gravemente a los niños y debería ocupar un lugar prioritario en la agenda sobre desplazados y migración global”, afirmó Manuel Fontaine, director regional del Unicef para África Central y Occidental.
“Las necesidades humanitarias siguen aumentando a pesar de que ahora se puede acceder a áreas del noroeste de Nigeria previamente inaccesibles”, indicó.
El reporte de Unicef analiza el impacto de la insurgencia de Boko Haram sobre los niños en Nigeria, Camerún, Chad y Níger, así como su efecto devastador para la infancia.
En la actualidad hay 2.6 millones de personas desplazadas debido a la violencia, según la agencia de las Naciones Unidas, que teme que otros 2.2 millones -de ellos más de la mitad niños- podrían estar atrapadas en zonas bajo control de Boko Haram.
Se estima que unos 38 niños han sido utilizado para llevar a cabo ataques suicidas en la cuenca del lago de Chad en lo que va de este año, elevando a 86 el número de menores usados para tal fin desde 2014.
Según Unicef, cerca de 475 mil menores en toda la región sufren desnutrición aguda, un importante aumento respecto a los 175 mil reportados a principios de año, además unos 20 mil niños han sido separados de sus familias en el norte de Nigeria.
Unicef lamentó que sólo haya recibido el 13 por ciento de los 308 millones de dólares que necesita para prestar asistencia a las familias afectadas por la violencia de Boko Haram en Nigeria, Níger, Chad y Camerún.
Desde el inicio de su insurgencia en 2009, Boko Haram han dejado más de 20 mil muertos y más de 2.6 millones desplazados en Nigeria y las vecinas Camerún, Níger y Chad, a donde los extremistas han extendido sus ataques en los últimos años.