Saná, 29 Ago (Notimex).- Al menos 60 personas perdieron la vida y decenas más resultaron heridas por la explosión de un coche bomba en un centro de reclutamiento del Ejército en Aden, en el sur del Yemen.
Versiones preliminares indican que un atacante suicida irrumpió con su vehículo en una escuela empleada para el reclutamiento de soldados en el barrio de Al Mansura.
Los soldados (combatientes partidarios del gobierno), murieron cuando se preparaban para viajar a Arabia Saudita y combatir en la zona de la frontera norte yemení contra los rebeldes hutíes.
Los ataques en Adén a menudo son reclamados por los yihadistas de Al-Qaeda o el grupo Estado Islámico, pero hasta el momento ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque.
Adén es la sede provisional del gobierno del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, que se enfrenta a los rebeldes hutíes en la guerra civil que afecta al país desde septiembre de 2014. Los hutíes son de confesión chiíta y cuentan con el apoyo no reconocido de Irán.
Yemen se encuentra guerra interna desde 2012 cuando fue depuesto el entonces presidente Ali Abdulá Saleh, cuyos partidarios están luchando ahora junto a los hutíes, quienes tras irrumpir en Saná obligaron a Hadi a huir hacia la ciudad portuaria de Adén.
En marzo de 2015, el persistente acoso de los rebeldes también sobre Adén llevó a Hadi a abandonar Yemen y exiliarse en Arabia Saudita, cuya coalición aérea árabe apoya desde entonces a las fuerzas yemeníes pro gubernamentales a avanzar sobre Saná desde el norte y el este.
Las operaciones continuas de la coalición, en la que participan Qatar, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos, Bahrein, Egipto, Marruecos, Jordania, Sudán y Senegal, han causado la muerte de seis mil 600 personas, según cifras de la ONU.
Los bombardeos fueron suspendidos en marzo pasado a raíz de un acuerdo para aplacar los combates en la frontera entre Yemen y Arabia Saudita, y allanar el camino a negociaciones que permitiesen poner fin al conflicto que ha causado el desplazamiento de 2.8 millones de personas.
Sin embargo, las conversaciones de paz colapsaron a principios de agosto, tres meses después de haber iniciado sin alcanzar ningún tipo de avance.