MAIDUGURI, Nigeria, septiembre 4 (AP)
El ejército nigeriano sostiene que algunos oficiales venden armas y municiones a Boko Haram, señal de que la corrupción que complica la lucha contra los extremistas islámicos continúa a pesar de los esfuerzos del Gobierno para combatir el soborno.
Hace tres semanas, el ejército dijo que un tribunal militar juzgaba a 16 oficiales y soldados acusados de delitos relacionados con la lucha contra Boko Haram, como el robo y venta de municiones.
El mayor general Lucky Irabor, comandante de las fuerzas en el noreste de Nigeria, dijo en conferencia de prensa el jueves que las autoridades militares han confirmado la venta de armas y municiones a Boko Haram. Dijo que era una traición al pueblo nigeriano, pero no entró en detalles.
El presidente Muhammadu Buhari ha dicho que la corrupción es responsable de muchas de las 20 mil muertes provocadas por la insurgencia, iniciada hace siete años. Niños que escaparon de Boko Haram mueren de inanición en campamentos para refugiados en el noreste, donde se investigan denuncias de robos de alimentos enviados por organizaciones de ayuda humanitaria.
Un soldado en la primera línea de fuego dijo a la Associated Press que el jefe de su brigada es uno de los acusados ante el tribunal militar en esta ciudad del noreste, que sesiona a puertas cerradas. Dijo que el ejército investiga qué sucedió con 21 cañones antiaéreos enviados a su brigada de artillería, de los cuales recibieron uno solo. El soldado habló bajo la condición de no ser identificado por temor a perder su puesto.
Además se investiga a varios oficiales retirados y en actividad por la malversación de cientos de millones de dólares asignados al combate contra la insurgencia islámica. Uno de ellos es Alex Badeh, un general a quien Buhari destituyó como jefe del estado mayor de la defensas. Varios testigos declararon ante una corte federal que Badeh robó el equivalente de 24 millones de dólares asignados a sueldos en 2013 y construyó un centro comercial en Abuja, la capital.