Carla Ramírez.-
En el Museo Regional de Historia estuvieron de fiesta al realizar una verbena familiar en donde la ciudadanía en general fue partícipe de diferentes actividades recreativas.
La fiesta se puso “buena”, como coloquialmente se diría, y es que hubo de todo, paltillos típicos mexicanos, música, baile, aplausos, porras, la gente no paró de reír, de disfrutar de pasar una tarde agradable, en compañía de sus seres queridos.
Desde muy temprano la gente fue llegando al lugar, las butacas una a una se fueron ocupando, todos a la expectativa de vivir una de las mejores tardes, pero sobre todo, la gente se dejó contagiar por el momento y por un momento dejaron atrás cualquier dificultad de la vida para deleitarse con una tarde dedicada especialmente para ellos.
Los encargados del Museo Regional se dieron a la tarea de realizar actividades para toda la familia: a los niños les colocaron una mesita con dibujos y crayolas para que dieran rienda suelta a su imaginación y desarrollarán su lado artístico; a los adultos les ofrecieron un espectáculo de música, con el que incluso los pusieron a bailar, los aplausos no pararon durante toda la tarde.
Al finalizar el público asistente agradeció infinitamente loa participación de todo el equipo de trabajo de este recinto cultural, pues planearon con gran detalle cada una de las actividades de convivencia.