Fabiola Escobedo.-
El Pollo Feliz es el lugar adecuado para una tarde en compañía de la familia, para ver tu serie favorita en casa, o cuando quieres algo delicioso solo por ser rico, si es para llevar, pero también puedes comerlo ahí mismo. Así de sencillo fue para mí decidir por un pollo feliz y poder compartirlo con mis seres amados.
Es jugoso, pues la parrilla le permite un sellado perfecto en la piel, sabe delicioso. Muchos escogen la pierna, o la pechuga, incluso las alitas, porque piensan que es más rico uno que otro, pero para mi todas las piezas están tan deliciosas, que por eso me encanta ir a ese establecimiento, además de contar con un amplio estacionamiento.
El ambiente se nota que es dinámico porque se encuentran dedicados en atender al cliente de una manera efectiva y rápida. Su servicio es muy eficiente, siempre con una sonrisa en el rostro. A mi me gusta esperar el pollo comiendo totopos con salsa, es el mejor tiempo en mi experiencia, porque es acidita y molcajeteada.
Pero que me den además salsa de estupendo sazón para llevar y totopos hace que me sienta más feliz.
También te recomiendo que pruebes las quesadillas, porque su queso tiene como un secreto que seguro hará que pidas otra. Los invito a que la prueben y descubran si hay secreto o no. Además cuenta con deliciosas hamburguesas, ensaladas, taquitos dorados y sus ricos postres y pays.
¡El Pollo Feliz es una excelente opción! Y no hay otro mejor.