BUENOS AIRES, Argentina, septiembre 27 (Notimex)
Miles de trabajadores marcharon hoy en Argentina como parte de una huelga convocada para repudiar los altos niveles de inflación y los despidos que han marcado al gobierno del presidente Mauricio Macri.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y partidos de izquierda colmaron las calles del centro de Buenos Aires en reclamo de la apertura de “paritarias”, que son los acuerdos de alzas salariales que realizan anualmente sindicatos y empresas con intermediación del gobierno.
El problema es que este año los gremios más favorecidos alcanzaron incrementos del 30 por ciento, pero la inflación ya supera el 40 por ciento, por lo que las “paritarias” quedaron desfasadas por completo y el poder adquisitivo de los trabajadores mermó.
A ello se le suma la política de despidos que aplicó Macri en cuanto asumió el Gobierno, en diciembre pasado, y que hasta ahora, según las cifras oficiales, ha dejado en la calle a más de 120 mil trabajadores en el sector estatal y privado.
Los manifestantes, que culminaron la marcha con un acto en la Plaza de Mayo, exigieron que las autoridades declaren una “emergencia social” que incremente los apoyos a los sectores más desfavorecidos, ya que son quienes más padecen la crisis.
Néstor Pitrola, dirigente del Partido Obrero, explicó que esta jornada es apenas un preludio a la huelga nacional que se realizarán para protestar contra las políticas de ajuste económico aplicadas por Macri.
“Hoy la izquierda y el clasismo paran y movilizan por paro activo y nacional y plan de lucha para que el ajuste lo paguen los capitalistas: reapertura de paritarias, aumento de emergencia a los jubilados y ningún despido”, señaló.
En la Plaza de Mayo, la marcha se encontró con el campamento que iniciaron anoche y por tiempo indefinido diversas organizaciones sociales para impugnar el ajuste económico y los “tarifazos” que impulsó el Gobierno para aumentar el cobro de luz, agua y gas.
Las carpas son ocupadas por manifestantes de esta capital y de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Neuquén y Chaco, quienes explicaron en un comunicado que el gobierno anterior, encabezado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, instaló y naturalizó la precariedad.
“El actual parece empeñado en extinguirla, pero por la vía de la inanición. Los tarifazos, el ajuste inflacionario, el otro ajuste directo, la destrucción de puestos de trabajo y la multiplicación de la pobreza golpean sobre las mismas espaldas en las que han recaído siempre», señalaron.