ZURICH, Alemania, octubre 3 (AP)
Aunque la fama le llegó muy pronto, Daniel Radcliffe es la excepción a la regla de que los niños estrella se vuelven conflictivos. Sonríe todo el tiempo, es amable, cálido y sobre todo, inteligente. En una conversación con El Universal en el céntrico hotel Widder en Zurich donde en estos días se lleva a cabo el festival internacional de cine de la ciudad, Radcliffe habló de su nueva película, Imperium, pero también de cómo el cineasta mexicano Alfonso Cuarón fue una especie de maestro que ayudó a crecer al intérprete del niño mago Harry Potter.
Radcliffe y Cuarón trabajaron juntos en Harry Potter y el prisionero de Azkaban. El actor dice que ha seguido en contacto con el director mexicano e incluso tiene un proyecto frustrado con él. “Alfonso y yo hablamos acerca de hacer un proyecto juntos hace un tiempo y estuvimos mucho en contacto pero al final no se pudo concretar.
“De igual forma creo que es un director que supo llevar como nadie la serie de Harry Potter a un lugar muy interesante que ningún otro cineasta habría podido conseguir. Incluso para nosotros como actores fue una guía muy importante porque en ese entonces teníamos todos 13 o 14 años y estábamos listos para dar ese siguiente paso y él nos ayudó a hacerlo. Es un director increíble que cada vez hace mejores y mejores cosas”.
Acerca de cómo ha logrado lidiar con la fama, Radcliffe aseguró que es un proceso: “tienes que aprender a manejar muchas cosas”.
“En términos de la relación con los medios, por ejemplo, he aprendido a ser más cuidadoso y a protegerme más de lo que lo hacía antes, ahora soy más reservado. Pero es que sólo puedes aprender cometiendo errores.
“Diciendo mucho más de lo que deberías haber dicho, metiendo la pata en ocasiones. Pero también creo que es mucho más fácil cuando te llega la fama siendo muy joven que cuando tienes 18 o 19 años porque cuando eres un niño eres muy flexible y te adaptas fácilmente a todo. Por eso me alegro de que la fama me llegara desde pequeño. Creo que también fui muy afortunado al poder tener a mis padres muy cerca de mí todo el tiempo y a mis amigos dentro y fuera del set para mantener los pies en la tierra. Gente muy dulce, cariñosa y auténtica. Eso lo es todo”, comentó el actor británico.
Su Imperio. Respecto a su nueva cinta, en donde Daniel interpreta a Nate Foster, un infiltrado del FBI en un grupo neonazi, aseguró: “Hacer este filme fue una gran experiencia porque me encantó trabajar con ese equipo y con el director Daniel Ragussis.
“El tema es muy intenso y por tristeza, relevante, pero quizá lo más fuerte del proceso fue la investigación porque tuve que leer mucho acerca de los neonazis y eso es lo que ocupa tu cerebro y se te queda en la mente. Este no es un filme político, pero obviamente tiene temas que sí lo son y que despiertan el interés y las opiniones que con suerte llegarán a formar parte de conversaciones”, explicó el actor.
Para preparar su personaje Daniel pudo conocer al verdadero agente del FBI en el que está basada la película y hacerle muchas preguntas. “Sí, lo mejor de todo fue que pude preguntarle cómo es la experiencia de estar infiltrado. Eso me ayudó mucho. También hice mucha investigación en libros pero sobre todo en las websites”.