CIUDAD DE MÉXICO, octubre 23 (Notimex)
Tigres de la UANL aprovechó la superioridad numérica sobre Pumas de la UNAM para vencerlo 3-1 y acabar con el invicto auriazul en el estadio Olímpico Universitario, en duelo de la fecha 14 del Torneo Apertura 2016 de la Liga MX.
Con este descalabro, UNAM se estancó en el noveno lugar de la tabla con 20 unidades y por ahora está fuera de la liguilla. Los felinos del norte llegaron a 26 en el segundo puesto de la tabla.
En un estadio, en su mayoría pintado de rosa por la campaña organizada por los de casa contra el Cáncer de Mama, Pumas y Tigres iniciaron un prometedor compromiso en busca del arco contrario, sobre todo los auriazules necesitados de puntos al estar fuera de zona de liguilla antes del inicio de este juego.
Marcelo Alatorre, quien en la semana avisó que la marrullería era válida para frenar la ofensiva de Tigres, cometió falta en las cercanías del área para provocar el tiro libre y gol de Lucas Zelarayán y colocar el 1-0.
El dominio visitante continuó e Ismael Sosa, ex de Pumas que se llevó los aplausos del presente antes del comienzo del choque, estuvo cerca de anotar pero “Pikolín” Palacios lo evitó con su achique a tiempo.
La situación se complicó más para los locales, luego que en mediocampo Alatorre se barrió sobre Jorge Torres Nilo para irse expulsado y dejar con diez a los del Pedregal, que tenían que remar contracorriente desde muy temprana hora, al minuto 21.
El estratega local, Juan Francisco Palencia, acomodó a su conjunto y antes del descanso, con muy poco al frente, logró el empate desde una acción de saque de banda que concluyó Britos con disparo cruzado que pegó en el poste y acabó en el fondo de las redes para 1-1.
Tras el descanso, la imprecisión apareció en los dos clubes y la lógica imperó, un Pumas acomodando atrás y en busca del contragolpe y un Tigres con la posesión del balón pero sin asfixiar al oponente, al estilo de Ricardo Ferretti, sin presionar del todo pese a la superioridad numérica.
El cuadro de la Universidad Autónoma de Nuevo León recuperó la ventaja 2-1 gracias a sus individualidades, Ismael Sosa sirvió a Derlot, quien dentro del área no perdonó y anotó para estrenarse en la Liga MX, justo cuando ocupó el lugar de su compatriota André-Pierre Gignac que por lesión ni siquiera hizo el viaje a la capital.
La anotación de Tigres cayó justo cuando los auriazules dejaron escapar una clara ocasión de contragolpe, por lo que la regla se cumplió: después del error vino el acierto y gol del rival. Dicho esto para aumentar las dificultades al local.
“Paco” Palencia y sus Pumas no quisieron quedarse atrás, arriesgó todo con la sustitución del defensa y capitán Luis Fuentes y la entrada del eje de ataque Eduardo Herrera en pos de cerrar el juego con dignidad, pero el que fuera ídolo auriazul, Sosa, acabó con el sueño del empate y puso el 3-1 para Tigres, eso sí sin celebrarlo.