Alberto de la Garza.-
Demostrando un excelente nivel en cada uno de los duelos, ex Copa Davis y extranjeros rankeados en la ATP tuvieron participación en la edición 47 de la Copa Victoria de Tenis 2016, que se llevó a cabo en las instalaciones del Club Campestre Victoria, donde el cubano Lázaro Navarro Batles logró proclamarse como el campeón.
Más de 80 raquetistas, entre juveniles y mayores dentro de las modalidades de Singles y Dobles, participaron durante una semana, concluyendo este domingo con los encuentros finales, cena y premiación a lo más destacado del torneo.
En la categoría Abierta masculina, Lázaro Navarro Batles, de La Habana, Cuba, levantó el premio mayor de 16 mil pesos, rinde en trepidante Final al mexiquense Carlos Ramírez Utermann, en dos sets al hilo 7/6 y 7/6.
El isleño sembrado número uno del torneo, tuvo que echar mano de sus mejores argumentos para agenciarse el triunfo, potencia en el saque y ataque en la red causaron efectos en un adversario que en todo momento se comportó a la altura, pero que en las instancias clave no supo capitalizar la ofensiva.
En Dobles “A” con “B” Femenil, destaca el título de la pequeña de once años Julia González (Tampico) haciendo pareja con la internacional victorense Mileva Cárdenas Serna, imponen condiciones frente a Beatriz Sánchez y Esmeralda Hernández.
Un par de voleas pegadas a la raya, por parte de Ricardo González, principalmente en situaciones adversas, aunado a la soltura en el rectángulo de José Schekaiban (Tampico), acabaron con la esperanza de Ramiro Trejo y Julio Arteaga, en 35 años.
Cabe mencionar que Francisco Nava y Pedro Gutiérrez salen monarcas en Singles de 35 y Mayores de 50 años, respectivamente.
Es importante mencionar que la bolsa de 62 mil pesos establecida en la convocatoria fue repartida entre los mejores de cada categoría, además hubo rifa de regalos donados por los patrocinadores, acto encabezado por el licenciado Ricardo González Villarreal, director de la XLVII Copa Victoria, junto a Denisse I y al árbitro general William Salinas Castillo.
Gran profesionalismo del Comité Organizador, disponibilidad de tenistas estatales, así como del interior del país, de naciones como Venezuela y Estados Unidos, sin perder de vista la indudable respuesta de la familia Campestre, factores combinados para un marcado éxito.
