Clemente Zapata M.-
El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Tamaulipas analiza e integrará un diagnóstico y padrón de menores que han quedado en orfandad, como consecuencia de los hechos de violencia suscitados en la entidad durante los últimos años.
La directora del DIF estatal, Omeheira López Reyna, reconoció que no existen datos estadísticos que le permitan a las autoridades tener conocimiento de la cifra exacta de infantes que sufran por la pérdida de sus padres, carencias o dificultades para seguir su desarrollo, de ahí la importancia de contar con datos específicos al respecto.
“Se está creando un diagnóstico en torno a eso, no hay un padrón o diagnóstico de cuántos menores en condiciones de orfandad están, sobre todo menores, por delitos de alto impacto, que sabemos que Tamaulipas tienen una problemática fuerte”, dijo.
Por ello crearán un programa específico, a instrucción de la presidenta del Patronato del DIF Tamaulipas, Mariana Gómez de García Cabeza de Vaca, y que son innovaciones de las nuevas autoridades para trabajar en ese sentido, y de ahí partir a un presupuesto específico de cuánto se pueda invertir.
“Va a ser una corresponsabilidad, entre la sociedad, buscar que las familias de estos menores, en segundo o tercer grado también entren en apoyo, no necesitamos crear casas de albergue para menores de esta naturaleza, lo que se tiene que hacer es crear una política que los ayude a sostener mayor educación y no se conviertan en foco especial de víctimas del delito”, indicó.
La también ex diputada federal admitió que esos menores que quedan huérfanos se convierten en un sector vulnerable al quedarse en algunos casos en abandono o al cuidado de sus abuelos, quienes carecen de las capacidades para mantenerlos y otorgarles el desarrollo educativo adecuado.
En Tamaulipas, de acuerdo a cifras dadas a conocer por autoridades federales y estatales, se tiene un aproximado de cinco mil 700 personas desaparecidas, y basados en ese número se podría calcular los menores afectados, sin embargo pidió no especular al respecto y esperar los resultados del diagnóstico.
“Creo que necesitamos garantizar la educación de los niños, que no sean cooptados por el crimen y poderles garantizar la educación hasta el nivel superior, partiendo de ahí vamos a lograr recuperarlos”, señaló.
Independientemente si son hijos de presuntos delincuentes o ajenos a los hechos de violencia, reconoció Omeheira López, se debe atender por igual a los menores porque ellos son los menos responsables de las circunstancias por las que atraviesan y se suscita en los municipios donde más se han sufrido hechos de violencia.
“En todos los sentidos, las familias que lo han sufrido, sean involucradas o no, en estos delitos, los niños no tiene la culpa, no hay que hacer una diferencia en esos niños, todos son menores y son el futuro de Tamaulipas y es lo que debemos trabajar”, concluyó.