SAN FRANCISCO (AP).- Nuevas directrices de la Academia Estadounidense de Pediatría recomiendan que los bebés duerman en la habitación de los padres por al menos seis meses y hasta un año para reducir el riesgo de muerte durante el sueño.
Las recomendaciones dicen que los bebés deberán dormir en una superficie separada, en una cuna o un moisés, y nunca en algo suave.
El grupo de pediatría más influyente en Estados Unidos actualiza sus directrices sobre la base de estudios que indican que el colecho reduce hasta en 50% el riesgo de muerte súbita en bebés.
Durante dos décadas, la academia ha recomendado que los bebés duerman bocarriba para reducir el riesgo del síndrome de muerte súbita.
Otras recomendaciones incluyen: no compartir la cama con el bebé, no usar protectores para las cunas, no colocar mantas, almohadas y juguetes suaves, y alimentarlos con leche materna.
Cada año fallecen tres mil 500 niños por muerte súbita en Estados Unidos, lo que motiva la actualización de directrices el lunes.
Tras hacer notar que los riesgos son mayores en los seis primeros meses, la AAP (por sus siglas en ingles) dice que compartir la habitación, pero no la cama, puede ayudar a prevenir las muertes que ocurren cuando los bebés duermen con los padres.
«Colocar la cuna cerca de la cama de los padres para que el bebé esté a la vista y el alcance puede facilitar el amamantamiento y el monitoreo del bebé», dijo la academia.