NUEVA DELHI, India, octubre 31 (AP)
Los indios se despertaron este lunes bajo cielos llenos de humo tras un fin de semana de celebraciones con fuegos artificiales, al comienzo de la peor temporada en Nueva Delhi para la contaminación aérea, que tiene graves consecuencias.
Unos dos mil millones de niños en el mundo respiran aire tóxico y alrededor de un tercio de ellos vive en el norte de India y los países vecinos, según un nuevo reporte de Unicef. Estos menores corren peligro de graves efectos sobre su salud, como daños en los pulmones, el cerebro y otros órganos.
Del total global, 300 millones de niños están expuestos a niveles de polución que son más de seis veces el estándar fijado por la Organización Mundial de Salud, incluidos 220 millones de menores en el sur de Asia.
Para la capital india, las cifras no son una gran sorpresa. La contaminación del aire en Nueva Delhi está entre las peores del mundo y se dispara cada invierno por los flojos vientos de la temporada y las incontables hogueras de basura que enciende la gente para mantenerse caliente.
Incluso antes de que estallaran en la ciudad las tradicionales celebraciones pirotécnicas del feriado hindú de Diwali, los niveles registrados de las diminutas partículas conocidas como PM 2.5, que atascan los pulmones, estaban el viernes muy por encima de los 300 microgramos por metro cúbico. Para el lunes por la mañana, la ciudad tenía unos niveles de PM 2.5 superiores a 900 mcg por metro cúbico, más de 90 veces la recomendación de la OMS de que no se superen los 10 mcg por metro cúbico.
Este lunes se recomendó a los vecinos de Nueva Delhi que se quedaran en interior, y se emitieron advertencias sanitarias para jóvenes, ancianos y personas con problemas respiratorios o cardiacos. Las autoridades informaron que los altos niveles de polución habían empeorado por las quemas que siguen en marcha de rastrojos en campos de cultivo de los vecinos estados de Punjab y Haryana.
“Los niveles de contaminación suben cada invierno, y estamos empezando a ver los indicios”, explicó Anumita Roy Chowdhury, directora ejecutiva del Centro para la Ciencia y el Medio Ambiente, una organización de cabildeo e investigación en Delhi. Algunos estudios locales indican que hasta un tercio de los niños de Delhi tienen insuficiencia respiratoria y problemas como asma, informó. “Esto señala a un desastre sanitario”.
La contaminación supone riesgos sanitarios mucho mayores para los niños que para los adultos. Los niños respiran al doble de velocidad, y toman más aire en proporción con su peso corporal, mientras que sus cerebros y sistemas inmunes siguen en desarrollo y son vulnerables.
Cada año mueren 600 mil niños menores de cinco años por enfermedades relacionadas con la contaminación, afirmó el director ejecutivo de Unicef Anthony Lake, en un informe publicado este lunes.