Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Al menos 13 familias del ejido San Juan y El Ranchito, del municipio de Victoria, iniciaron un litigio administrativo ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en contra de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en reclamo de una indemnización por daños en sus aparatos domésticos a consecuencia de un cortocircuito en las líneas de baja tensión ocurrido el pasado 28 de agosto.
Algunos de los afectados solicitaron asesoría del Instituto de Defensoría Pública del Poder Judicial Federal (PJF), ante la negativa de la paraestatal a reconocer la responsabilidad en los hechos.
En una primera audiencia las partes no lograron un acuerdo, por lo que la Profeco convocó a una segunda reunión el 13 de diciembre próximo.
De acuerdo a la versión de algunos afectados, el cortocircuito se derivó de que los separadores de madera “tronaron” y generaron una falla en las líneas de baja tensión.
Como consecuencia de ello, en al menos 13 domicilios “tronaron” refrigeradores, televisores, abanicos y otros aparatos, por lo que los afectados están pidiendo a la CFE se haga responsable de los daños.
“En una primera audiencia no reconocieron la culpa, por lo que nos vamos a volver a reunir para intentar llegar a un acuerdo”, dijo uno de los afectados.
Los técnicos de la CFE argumentan que los daños a los aparatos se originaron de instalaciones defectuosas en los hogares y no por el cortocircuito.
Los ejidatarios buscaron el apoyo de asesores y defensores públicos federales para saber el canal de defensa que tendrán en caso de que la CFE se niegue definitivamente a admitir su culpa.
