diciembre 11, 2024
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noviembre 16, 2016 | 104 vistas

Alfredo Guevara.-

La advertencia del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de hacer una repatriación de dos a tres millones por año, representa una preocupación palpable de quienes se encuentran en condición de ilegal en el vecino país del norte; “precisamente por la fuente de quien lo dice”, confirmó Juan José Rodríguez Alvarado.

El Coordinador Nacional de las Oficinas Estatales de Atención al Migrante expuso que ante una medida de esa naturaleza, el Gobierno de la República está diseñando un plan de contingencia, en el que ha girado instrucciones a los 50 consulados que México tiene en los Estados Unidos.

De lo que se trata, es que los consulados dispongan de mucha información de los mexicanos que residen en alguna parte del extranjero, se brinde protección a los migrantes como a sus familias y velen por sus derechos, independientemente de la condición migratoria en la que se encuentren, aseveró.

“Hasta ahora se desconocen, no se han difundido los detalles y no los van a difundir y aun cuando hay quienes dicen que no, hay también quienes dicen que sí, pero en este caso lo dice quién tiene la autoridad de hacerlo, es decir el presidente electo Donald Trump”, citó.

Consideró que la repatriación masiva de indocumentados en Estados Unidos puede ser una realidad, si se toma en cuenta que el Presidente electo lo está declarando reiteradamente.

Hizo ver que el presidente Barack Obama en un periodo de ocho años llevó a cabo la repatriación de dos millones 800 mil personas; “y lo que refiere el electo, es hacer de dos a tres millones en un año, lo que representa una preocupación palpable, precisamente por la fuente de quien lo está diciendo”, subrayó.

Negó que una de las formas en las que se estaría haciendo esta repatriación a través del uso de “redadas”, por considerar que además de que se trata de una dinámica compleja, ya no hay tanta migración hacia los Estados Unidos.

Y es que las estadísticas señalan cero migración, es decir que los que se van son los mismos que regresan a sus lugares de origen, lo que indica que si no hay un crecimiento de los mexicanos en Estados Unidos, la deportación que se haría es de gente que tiene de dos a por lo menos 20 años trabajando en el vecino país del norte.

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