México, 8 Dic (Notimex).- Chefs y asociaciones internacionales aseguran que los mexicanos no gustan de las ensaladas, porque no se incluyen desde temprana edad y los platillos no tienen variedad ni atractivo.
“Cuando vas a un restaurante y pides ensalada sólo existe la presentación de lechugas con aderezo y esto es triste, porque en México existe una enorme diversidad», lamentó Paulina Moreno, integrante de la Humane Society International.
“A nadie le gusta esas lechugas o presentaciones simples, ni a los vegetarianos, entonces hay que ir transformando la presentación de los platos y mostrar la riqueza de la gran cantidad de nutrientes que tenemos”, agregó.
Al término de la plática sobre la variedad, combinación y presentación de vegetales en un restaurante de la Ciudad de México, el chef Javier Medvedovsky indicó que la falta de ensaladas en la vida diaria de los mexicanos es un problema que se adquiere desde casa.
“Si desde pequeños no se alienta a comer ensaladas, de grandes no van a comer alimentos frescos, pues no tenemos conocimiento de ellos y no estamos acostumbrados a sabores suaves, se tiene la costumbre de comer sabores muy realzados”, apuntó.
El cocinero de la tendencia raw food (comida cruda) recomendó incluir formas placenteras a las ensaladas e incluir vegetales a cualquier otro alimento. Asimismo, buscar información sobre vegetales, granos, cereales y sus combinaciones.
“Yo en México veo un contraste, una comida autóctona muy buena pero combinada con la chatarra. Por suerte sigue habiendo esta elaboración casera que esperamos que no se pierda”, destacó.
Por otra parte, Paulina Moreno explicó que la organización de bienestar animal Humane Society International promueve los lunes sin carne en 36 países, a fin de contribuir con la reducción de su consumo.
“La idea es que sustituyan su platillo favorito por otro basado en vegetales, por ejemplo, si te gustan los taquitos de pollo los puedes rellenar de papa y calabaza. Se trata de incluir más vegetales”, subrayó.
Señaló que la iniciativa, avalada por hospitales y universidades, es una oportunidad para prevenir diabetes tipo 2, cáncer y obesidad “las tres enfermedades que están acabando con nosotros».
Asimismo, dijo que esta reducción favorece al medio ambiente y a la sustentabilidad, pues “está comprobado que con que una sola persona que no coma carne los lunes, se pueden ahorrar mil 300 litros de agua”.
“Según datos de organizaciones, para producir un kilo de pollo se utilizan seis mil litros de agua, mientras que para un kilo de frijol se necesitan menos de la mitad como 2 mil 800 litros”, enfatizó.
Aclaró que la campaña que llegó a México en 2015 no está en contra del consumo de carne, sin embargo, sí promueve su reducción para beneficio de la salud, protección animal y del medio ambiente.