CARACAS, Venezuela, diciembre 7 (AP)
A las filas de los bancos de Venezuela no se llega con las manos vacías: la inflación es tan alta que es común observar hombres y mujeres cargados de mochilas, cajas cartón y carritos de supermercado repletos de billetes.
Los comercios se resisten a recibir cheques y los bancos fijan límites de crédito insuficientes para que la gente pueda pagar artículos básicos, bienes y servicios. Hay tarjetas cuyo techo es 60 mil bolívares, pero en Caracas un neumático cuesta entre 90 mily 130 mil bolívares. En Venezuela, sufrir un pinchazo en la carretera puede convertirse en la peor pesadilla de un conductor.
Para tratar de solucionar la situación, el Banco Central de Venezuela presentó el miércoles seis nuevos billetes que suman dos ceros a la antigua denominación. Nelson Merentes, presidente de la institución, dijo en una rueda de prensa que a partir del 15 de diciembre comenzarán a circular y su valor irá de 500 a 20 mil bolívares.
Aunque se especulaba que la imagen de Hugo Chávez podría aparecer en alguno de los nuevos billetes, éstos mantendrán la imagen de los próceres de la independencia venezolana, como Simón Bolívar. Se espera que con esta medida ya no sea necesario cargar con fajos y fajos de dinero para comprar algo tan sencillo como una bebida gaseosa de dos litros o un foco de tecnología LED.
Detrás de este problema hay un alto índice inflacionario de tres dígitos y una devaluación sostenida. Las consecuencias de la crisis económica se observan en las calles, a donde los venezolanos salen cargados con lo que ante unos ojos extranjeros parecerían grandes sumas de dinero.