CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 15 (Agencias)
El actor Will Smith interpreta a un padre que ha perdido a su hija en su más reciente película, “Collateral Beauty”, un personaje que, según aseguró en Londres, le ayudó a decir “adiós” a su padre, recientemente fallecido.
“Fue una oportunidad magnífica para mí poder interpretar a un personaje que lidiaba con la muerte de su hija al mismo tiempo que yo me preparaba para la muerte de mi padre”, aseguró el estadounidense, quien sostuvo que este es uno de los papeles que más le ha “transformado” de toda su carrera.
El amor, el tiempo y la muerte son el hilo conductor de este largometraje en el que un devastado publicista neoyorquino tiene que enfrentarse al duelo de haber perdido a su hija de seis años.
“Desde el primer momento que leí el guión quedé prendado del concepto de ‘Collateral Beauty’“, afirmó el actor de 48 años, una idea que quiere decir que “no importa cómo de mala sea tu situación, siempre hay algo bello por lo que merece la pena vivir”.
El dos veces nominado al Oscar -por “Ali” y “The Pursuit Of Happyness”- aclaró que esa “belleza oculta”, en su opinión, siempre va a estar relacionada con el amor y reconoció lo importante que es para él.
“He pasado la mayor parte de mi vida tratando de aprender a amar mejor, a ser más amable, más alegre y a cómo sentirme más lleno de amor”, concluyó.
Smith comparte cartel en este lacrimógeno filme -dirigido por David Frankel- con actores de la talla de Helen Mirren, Edward Norton, Keira Knightly, Kate Winslet, Jacob Latimore y Naomie Harris.
La muerte con vestido azul
Mirren, ganadora de un Oscar en 2006 por su papel en “The Queen”, interpreta en la cinta a la muerte vestida de azul.
“Le dije al director que me negaba a ir de negro”, declaró antes de añadir que escogió el azul porque “es el color de la eternidad, del cielo o del mar” y trasmite “un sentimiento de continuidad”.
La actriz, de 71 años, admitió que tiene miedo a la muerte pero que cuando le entra el temor le reconforta pensar que es algo “que nos une”.
“Mis mejores amigos, mis padres… todos están muertos, es algo que todos compartimos”, sostuvo.
Preguntada sobre qué le empujó a aceptar este papel, la interprete apuntó que fue la “confianza” que le inspiraba el director y las ganas que tenía de compartir un proyecto con Will Smith, con el que nunca había trabajado.
El responsable de grandes éxitos como “The Devil Wears Prada” (2006) o “Marley & Me” (2008), David Frankel, dirige este drama, ambientado en una navideña Nueva York, y del que reconoce podría existir cierta “conexión” con el “Cuento de Navidad”, de Charles Dickens.
“En el filme, como en el cuento de Dickens, también hay un viaje de una persona desde un lugar muy oscuro hasta llegar a la esperanza”, argumentó.
Amor, tiempo y muerte
No son el fantasma de las navidades pasadas, presentes y futuras quienes se le aparecen a “Howard Inlet” (Smith), pero sí el amor (Knightley), el tiempo (Latimore) y la muerte (Mirren), para recordarle por qué merece la pena vivir pese a la adversidad.
“Para mí el principal mensaje de la película es reconectar con las personas que quieres”, opinó Frankel, que contó la importancia de ambientar la cinta en Navidad y en Nueva York por la “magia” que transmiten.
Sobre el afamado reparto de la película, el director afirmó que lo “bueno de trabajar con tantísimos buenos actores es que estaban muy preparados”.
“El equipo soñado de Hollywood”, así es como lo describió Jacob Latimore, que definió como “increíble” su experiencia rodando “Belleza Oculta”.
“Nunca sabemos cómo vamos a reaccionar ante una tragedia como perder un hijo”, declaró la actriz Naomi Harris, que interpreta a una madre que pasa por lo mismo que el protagonista.
Harris afirmó que si tuviera que elegir entre más amor o más tiempo en la vida, sin duda, escogería la primera.
“Una vida corta pero llena de amor ya merece la pena”, concluyó.
