Israel Reséndiz.-
CIUDAD MANTE, Tam.- Ambulantes y automovilistas continúan adueñándose arbitrariamente de los espacios públicos por donde los peatones deben caminar de manera segura, tomando en cuenta que se trata de calles congestionadas de trafico vehicular, y de motociclistas que han mostrado no saber conducirse en la vía publica, pues continúan en riesgo de atropellar peatones.
Esta escena se puede ver en la calle Zaragoza a un costado del mercado municipal, en donde si no fuera suficiente el tener que caminar por el pavimento porque los locatarios del mercado municipal están utilizando las banquetas, todavía los automovilistas se siguen estacionando sobre la acera poniente.
Esta situación continúa generando un caos vehicular, pues por ese lugar se puede circular solo a vuelta de rueda, y con el riesgo de los peatones de no ser arrollados por motociclistas que utilizan las laterales de la fila vehicular para pasar más rápido, generando con ello un riesgo de atropellar a quienes pudieran caminar por ahí mismo, o cruzar la calle hacia la acera oriente.
Este escenario se sigue observando junto con otros de los puntos del primer cuadro de la ciudad en donde existe congestionamiento generado por los automovilistas que pretenden entrar a los estacionamientos de las tiendas comerciales, y con ello generan el entorpecimiento de la circulación de unidades motrices.
Pero aun así, el punto cercano al mercado municipal es uno de los que más ha generado el riesgo, pues a pesar de las circunstancias descritas es algo que año con año continúa de la misma manera, pues las estructuras de los locatarios del mercado, sus mercancías y además de ello los vehículos que se estacionan en la acerca cercana al centro de abasto, aumentan el riesgo de accidentes a peatones.
La situación pudiera agudizarse aún más durante el día de hoy, cuando la comunidad se dispone a comenzar las compras con motivo de la celebración de la Navidad en cada hogar, y en vísperas de recibir el Año Nuevo, en donde de igual manera la ciudadanía querrá hacer sus adquisiciones de manera simultánea a horas desesperadas.