Rubén Jasso
El animador anuncia sus nombres y la gente aplaude, se emociona, se dispone a disfrutar de la lucha porque saben que habrá espectáculo. Suben al escenario y al instante hacen “click” con sus aficionados. Entran en acción, pero además impregnan su presentación con ese toque de buen humor que suelen poner casi todos los gladiadores, y ambos tienen la fórmula exacta para captar la atención del público… y ganarse su cariño.
Ellos son Black Power y Black Power Junior, padre e hijo, técnico y rudo… rudo y técnico, su habilidad para bailar los distingue, y aunque a veces “discuten”, siempre están dispuestos a brindarse al máximo en cada lucha para agradar a sus seguidores, y además arrancarles esa auténtica sonrisa que viene a ser su mejor pago.
En una entrevista con este medio, “Black” y “Junior” cuentan sus inicios y su andar en esta disciplina, donde trazarse un camino no es sencillo, pero cuando el amor por lo que hacen salta a la vista… la ruta se hace más fácil.
¿Por qué la lucha libre?, se cuestiona de entrada.
“Porque desde muy niño me llevaron a una Arena y se me quedó esto de la lucha libre y desde ahí me enamoré y siempre he sido fanático desde niño y posteriormente yo me enteré que mi abuelo materno fue luchador en Poza Rica, Veracruz, no hay mucha historia sobre él pero familiares allegados me comentaron, ya venía en la sangre y por eso estamos en el mundo de la lucha libre”, responde Black Power.
Con mucho esfuerzo y sacrificio, el reconocido luchador suma ya diez años en esta disciplina, algo que lo llena de orgullo. “Estuvimos entrenando otros deportes también de contacto, pero el que más me llenó fue la lucha libre y son diez años trabajando para ir aprendiendo, (porque) en la lucha libre nunca dices ya sé todo siempre vas aprendiendo de todos y en todas las arenas”, sostiene.
¿Y cómo surge el nombre?
“Hay una película que a mí me gusta mucho que se llama ‘Duelo de Titanes’, es de futbol americano, y hay una escena donde llega un camión y van entrando unos jóvenes deportistas de piel morena y empiezan a gritar ¡Black Power! ¡Black Power! y me gustó más que nada porque mi tez también es morena y me gustó el nombre de ‘Poder Negro’ y aparte porque también me gusta lo que es la halterofilia, lo que es levantamiento de pesas”, explica.
Atento a la charla, “Junior” también recuerda sus inicios. “Yo debuté un día del padre y llevo dos años”, dice el pequeño gladiador de siete años de edad.
¿Y qué sientes cuando le pegan a tu padre?
Con sinceridad responde que a veces él también lo golpea en su papel de luchador. “Porque yo soy rudo pero a veces también me pongo de técnico, cuando él va de rudo yo me pongo de técnico y cuando él va de técnico yo me pongo de rudo y entonces ahí está nuestra rivalidad”, explica.
Para “Junior” aprender todo lo relacionado con la lucha libre no ha sido complicado pues tiene en “Black” a su mejor maestro, además de entablar una buena amistad con todos sus compañeros. “Me llevo bien con Fuego Latino, Cristian Wolf, Red Dragon, Esso el Payaso, todos los de Victoria y también de Encuentro de Guerreros”, reconoce.
Para complementar, Black Power sostiene que en este deporte existe algo más que un simple compañerismo. “Más que ser compañeros también somos una familia, donde quiera que estés en cualquier parte de México es una familia desde que llegas te pones tu máscara y vas entrando a una Arena… el calor de los niños, ver su cara y que vengan a saludarte eso es una gran satisfacción”, declara.
Y pondera la amistad por encima de cualquier victoria. “Arriba somos rivales porque queremos ganar y demostrar que somos mejores, pero ya bajando del ring somos personas, nos saludamos y se hacen amistades que duran mucho, todo va de la mano y te deja muchas satisfacciones, viajas a otros lugares, conoces gente que van siendo parte de ti y te van haciendo que crezcas como persona y como luchador”, afirma.
¿Qué sientes cuando un niño te pide una foto o te quiere saludar?
“Ahora sí que se te mueve todo, te estremeces y ahí están mis hijos y escuchar ‘papá te fue muy bien’ y ese es un gran orgullo”, refiere.
Al cuestionarlo sobre alguna lucha o episodio especial a lo largo de su trayectoria, sin dudar responde: “Todas son especiales, todas tienen lo suyo, a veces te toca compartir con gente de cartelera, independientes, Triple A, Consejo Mundial (de Lucha Libre) y ver a tus ídolos por un lado y decir ‘guau’, a mí me tocó una vez compartir escenario con Huracán Ramírez señor y yo ni me la creía, simplemente desde que llegué y al verlo ya estaba yo temblando, ¿Lo voy a enfrentar, lo llevo de compañero?, te quedas… pero todas las luchas tienen su toque y todas son especiales porque de todas vas a aprender algo”.
¿De los luchadores actuales a quién admiras?
“Al ‘Negro’ Navarro, Solar, Blue Demon, el Doctor Wagner y mi maestro también cómo no admirarlo, Jhonny El Pulpo, él fue quien nos enseñó”, reconoce.
¿Sería un sueño alternar con alguno de ellos?
“Pues sí es un bonito sueño, (pero) me gustaría conocerlos a todos, compartir un ring con todos, eso es lo que me agradaría pero bueno el tiempo lo dirá, el trabajo es el que va a hablar, todavía seguimos aprendiendo todo esto y el día de mañana ojalá y sí podamos compartir o estar en una cartelera ya con varios compañeros grandes”, menciona.
¿Y en qué lugares has luchado?
“He participado en todo Tamaulipas, en Ciudad Valles, en Tampico y hemos entrenado también en Poza Rica, en Monterrey no he ido a presentarme de lleno pero si he ido a entrenar”.
¿Has tenido algún momento complicado, alguna lesión?
“Yo tengo mi rodilla derecha lastimada, el tobillo izquierdo y a veces unos dolorcitos musculares pero tratamos de cuidarnos para que para cuando se tiene que presentar un espectáculo dar siempre lo mejor y estar en buenas condiciones”.
Acerca de la empatía de ambos luchadores con el público y el cariño que reciben, “Black” reconoce que siempre se entregan porque es la actividad que aman ejercer. “Para hacer algo tiene que gustarte, tiene que divertirte, sacar tu fuerza y demostrar lo que has aprendido, eso es algo esencial, porque si haces algo que no te gusta pues no va a salir, esto es de gustarte, divertirte, disfrutarlo y demostrar, claro, siempre ganar es lo que se busca pero también que la gente salga contenta porque haya pagado un boleto, que digan ‘quiero ver a este luchador’ y que salgan con esa satisfacción, eso es algo bonito”, señala.
Y así como existe un enorme público que les reconoce su trabajo, sobre el otro sector que no da un real valor a quienes arriesgan su físico arriba del escenario, Black Power se muestra respetuoso de todas las opiniones. “Al que le gusta ahí va estar y son a los que vamos a entretener, mis respetos para todo lo que piensan (pero) ha habido casos y me ha tocado que decían, a mí no me gustaba para nada pero fui una vez y me emocioné y aquí estoy”.
Respecto al escenario que fue su “casa” durante todo el 2016 y que ya parece quedarles “chico” por la cantidad de público que acude, Black Power reconoce que un sueño de él y todos los integrantes de Encuentro de Guerreros sería contar con un lugar especial para lucha libre. “Sería un gran logro para todos los compañeros que hubiera una Arena y que dijeran ‘aquí se presentan y van a estar domingo a domingo o cada 15 días’ eso sería muy bueno”.
Con orgullo, el experimentado gladiador afirma que eso los motivaría a trabajar aún más fuerte, “Y demostrar que en Ciudad Victoria también hay talento y cuando venga gente de fuera y que se enfrente con los de aquí que digan ‘sabes que Ciudad Victoria tiene buenos luchadores y el día de mañana me gustaría enfrentarme con ellos’ y en un lugar especial sería dar un entretenimiento a toda la familia porque va desde el chico al más grande”.
¿Qué le dirías a la gente que no conoce la lucha libre?
“Pues que vayan a ver nuestro trabajo, que vayan a apoyarnos para que esto se haga más grande y poder disfrutar de un bonito espectáculo, ahí están los luchadores y volver a retomar la lucha libre, que no se pierda porque la lucha libre es algo cultural de México, es algo que está arraigado, es parte de los mexicanos pues a cualquier ciudad que vayas hay algo de lucha libre”, dice convencido.
Y reitera su orgullo por formar parte de un grupo de jóvenes que se preparan día con día en busca de un constante crecimiento, haciendo el llamado para quien desee iniciarse en esta disciplina: “Los invitamos al Gimnasio del 27 Hidalgo donde se preparan los verdaderos luchadores y el talento local quienes son entrenados por personas que tienen años en esto e invitamos a los jóvenes que se interesen en ir, con el permiso de sus papás, de sus familiares, no hay límite, puede haber niños, ahí está ‘Junior’, lógico que hay un proceso no es decir ‘voy a entrenar tres días y ya soy luchador’, no, esto es un proceso que tiene que llevar mucho tiempo para que esto se dé y los invitamos a que vayan”.
“Junior” coincide totalmente con su papá y con mucha seriedad y madurez brinda un consejo: “A veces hay niños o personas que traen muchas energías y por eso les recomiendo que vayan a entrenar porque hay veces que empiezan a agarrarse a golpes en la casa pero eso no está bien, por eso es que los luchadores les decimos a los niños que no lo hagan en casa”.
Sobre la apertura de todos los luchadores de Victoria para brindar un espectáculo familiar y a un costo accesible, Black Power manifestó que el trabajo que han venido mostrando arriba del cuadrilátero llevará a la afición a pagar con gusto una entrada a sabiendas de que la función cumplirá con las expectativas. “Primero hay que demostrarle a la gente lo que hay para que el día de mañana digan ‘sabes que, vale la pena ir a gastar el costo de un boleto porque yo sé que en Encuentro de Guerreros hay calidad y espectáculo”, puntualizó.
