Héctor González Antonio.-
El estado de Tamaulipas, por su ubicación geográfica, vecino del estado de Texas, cuenta con una barrera natural para migrantes, el río Bravo, que se ha convertido a través de los años en un filtro mortal para aspirantes al sueño americano; donde se advierte difícil la construcción de un muro.
La vecindad con el citado estado norteamericano ha sido una caracterizada por el reforzamiento de la seguridad por parte de autoridades norteamericanas, desde el pasado periodo del ex gobernador Rick Perry (2000-2015), quien destinó cerca de 90 millones de dólares y mil elementos de la Guardia Nacional para resguardar la frontera.
Su sucesor, el actual gobernador texano, Greg Abbott, dio continuidad a la estrategia de seguridad, solo que cambió a la Guardia Nacional por los Rangers, quienes se encargan de evitar el paso de migrantes hacia su estado y país.
Hasta el momento esas autoridades texanas no se han pronunciado en relación a la construcción del muro fronterizo, pero sí dan cuenta con sus acciones de su política antiinmigrante, principalmente mexicanos.
Tamaulipas comparte con Texas 370 kilómetros de frontera, además de 17 puentes internacionales, por donde diariamente se realizan intercambios comerciales y de personas que transitan de sus lugares de residencia hacia sus empleos, además de otros servicios.
ALERTAS ENCENDIDAS
Luego de la propuesta del presidente electo Donald Trump, de expulsar a miles de migrantes mexicanos, se encendieron las alertas por parte de autoridades federales y de Tamaulipas, estas últimas se han manifestado mesuradas ante esa expresión del representante republicano.
Esta entidad se ha ocupado a nivel nacional entre el primero y segundo lugar en deportaciones de migrantes procedentes de los Estados Unidos, de acuerdo a estadísticas oficiales, durante el sexenio comprendido del 2011 a septiembre del 2016 fueron repatriados por Tamaulipas más de 511 mil migrantes, lo que representó el 30 por ciento de la repatriación en todo el país, la cual fue superior a un millón 722 mil personas.
Durante el 2011, por esta entidad fueron repatriados 124 mil 729 personas; en 2012, 122 mil 36; en 2013, más de 88 mil; en 2014 casi 78 mil; 2015, 56 mil, y de enero a septiembre del presente año 42 mil 580.
Tan solo durante el 2015, en Nuevo Laredo, perdieron la vida ahogados en el río Bravo más de 20 migrantes aspirantes al sueño americano, y sus cuerpos fueron recuperados por elementos de Protección Civil y Bomberos de esa localidad.
En el 2014 perdieron la vida 18 aspirantes a braceros y en el 2013 fueron 64 migrantes extranjeros y nacionales.
REPORTE DE FALLECIDOS
El Consulado de México en Laredo, Texas, a través de su página oficial refiere que para atender los casos de fallecimientos de connacionales migrantes se tiene establecido un sistema con las autoridades de la Patrulla Fronteriza, del Condado de Webb y de la Policía de Laredo, con el propósito de que se reporte al Consulado inmediatamente cuando se conoce del caso de un migrante fallecido.
Estas notificaciones ocurren las 24 horas del día, los siete días de la semana. El personal del Consulado visita inmediatamente las instalaciones policíacas a fin de revisar las pertenencias que tenía consigo la persona fallecida para iniciar lo más rápidamente que sea posible el proceso de su identificación y localización de familiares.
Cita la institución que en ocasiones solamente se encuentra una hoja de papel en el que está anotado un número telefónico y por esa vía se inicia la investigación. En otras, el migrante porta alguna identificación, pero hay ocasiones en las que no se encuentra ningún documento u objeto que sirva para identificar a la persona fallecida.
GRUPO BETA
El Instituto Nacional de Migración (INM) dio a conocer que el Grupo Beta en Matamoros, en el periodo de enero a septiembre del 2016 brindó asistencia a 248 migrantes; así como a 328 repatriados. Y se han coordinado con otras instancias en 13 casos.
En ese tenor, el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, en entrevistas anteriores dio a conocer que durante una reunión de la Comisión Nacional de Gobernadores (Conago), en Oaxaca, coincidieron en la necesidad de sumar esfuerzos en torno al presidente de la República, Enrique Peña Nieto, para atender el tema de los migrantes.
“Más allá de los colores e ideales partidistas, coincidimos en unir esfuerzos, voluntades y entender que los desafíos que tiene nuestro país van más allá de la situación política, tenemos que asegurarnos que cualquier cambio o posibles cambios de políticas públicas que quieran o que vayan a llevar el próximo gobierno de Estados Unidos, vamos a estar preparados para ello”, señaló.