Ciudad del Vaticano, 8 Ene (Notimex).- El Papa bromeó hoy cuando algunos bebés, a quienes estaba por bautizar en la Capilla Sixtina del Vaticano, empezaron a llorar y le pidió a las madres que los amamantasen sin vergüenza, incluso durante la misa.
“Y entonces… ¡empezó el concierto!”, exclamó Francisco durante el sermón de la misa –que tuvo lugar la mañana de este domingo- en la cual impartió el primer sacramento a 28 recién nacidos, 15 niños y 13 niñas.
“Es porque los niños se encuentran en un lugar que no conocen, se levantaron antes de tiempo. Empieza uno, da la nota y los otros lo siguen. Algunos lloran simplemente porque el otro lloró”, agregó.
Entonces aseguró que Jesús “hizo lo mismo”, porque su primera predicación fue su llanto al nacer. Como la ceremonia era larga y alguno lloraba por hambre, le pidió a las madres amamantar “sin miedo” y “con toda normalidad”, la Virgen lo hacía con el niño.
Como cada año, al celebrarse la fiesta del bautismo de Cristo, el Papa presidió los bautismos y le dijo, tanto a padres como a padrinos, que tomen en serio la fe, que no es simplemente rezar el “Credo” los domingos cuando se va a misa, sino “creer en la verdad”.
Más tarde, al mediodía, Jorge Mario Bergoglio se asomó a la ventana de su estudio personal en el Palacio Apostólico del Vaticano y recordó los bautismos, no sólo los que celebró este día sino también otro el sábado, de un joven convertido al catolicismo.
Sostuvo que el mensaje cristiano se transmite “con mansedumbre y firmeza”, sin “gritarle a nadie”, sin arrogancia e imposición, porque la “verdadera misión” nunca es proselitista sino de “atracción”.
